Llegó con su gestión como delegada del Gobierno bajo el brazo y una declaración de intenciones. En marzo de 2015 decía que "hay que luchar contra la corrupción con todas las fuerzas" y que ella estaba dispuesta "a hacerlo".
Cuando su nombre suena como candidata para Madrid, no pierde el tiempo en tratar de desvincularse de un PP inmerso en Gürtel, Púnica, Fundescam... Hablaba entonces de "tolerancia cero contra la corrupción".
Un partido del que ha formado parte en los últimos 30 años y del que hablaba así de su corrupción: "Me da vergüenza en todos los casos y en mi partido más". De esta forma se expresaba en marzo de 2015.
En mayo de 2015, el PP gana las elecciones en la Comunidad de Madrid, pero sin mayoría suficiente y así llega al 25 de junio de 2015 cuando es nombrada presidenta de la Comunidad de Madrid con el apoyo de Ciudadanos.
Tres años de Gobierno en los que Cifuentes se ha reivindicado como líder del cambio ante los casos de corrupción del PP insistiendo en que "el tiempo de los corruptos en la Comunidad de Madrid ha llegado a su fin".
Tras poner en manos de la Fiscalía las irregularidades del Canal que acabaron con la imputación de Ignacio González y acusada por Granados de haber estado al tanto siempre de la corrupción de su partido, se defendía diciendo que todo es una venganza. De esta manera lo aseguró en febrero de 2018 en laSexta Noche
Una persecución, decía, que es el precio de su lucha contra la corrupción. Exactamente el mismo argumento esgrimido cuando salió a la luz el escándalo del máster.