La reubicación de los menores no acompañados ha estallado una nueva crisis entre el PP y Vox. Este lunes, Santiago Abascal ha lanzando un ultimátum a los populares: como acepten el reparto que propondrá el Gobierno esta semana, romperá con los gobiernos regionales que comparte con el PP. Así, mientras 6.000 niños migrantes esperan su destino, cinco gobiernos del partido popular están en jaque.
Este lunes la ultraderecha ha sido clara y ha advertido al partido popular de que "abandonarán inmediatamente" los gobiernos autonómicos que comparten si los de Feijóo aceptan cualquier reparto de los menores migrantes llegados a Canarias.
"Nosotros no vamos a colaborar con la estafa de la dirección del PP y del señor Feijóo a sus propios votantes", ha indicado el líder de Vox en una rueda de prensa tras la reunión del Comité de Acción Política del partido.
Por su parte, el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha asegurado que las autonomías del PP serán solidarias siempre que tengan medios para acoger a estos menores.
"La práctica que hemos tenido durante muchos años en España y entiendo que sigue siendo, es ser solidario en la recepción de menores siempre que tengamos capacidad en las comunidades autónomas para recibirles, para tratarles y para cuidarles", ha enfatizado Feijóo, quien no ha querido responder directamente a la amenaza de sus socios de gobierno.
Si Vox cumpliera su promesa esto supondría romper el Gobierno de cinco comunidades autónomas, las de Aragón, Castilla y León, Región de Murcia, Extremadura y Comunidad Valenciana. En todas ellas, el PP pasaría a gobernar en solitario, lo que complicaría mucho su legislatura. Consciente de ello, el presidente valenciano, Carlos Mazón, ha intentado este lunes calmar los ánimos y ha pedido responsabilidad y sentido común, para denunciar más tarde que sus instalaciones de acogida están saturadas.
"A mí lo que me condiciona es la solidaridad pero también el sentido común. Y la realidad es que aquí en estos momentos no nos caben más en nuestras instalaciones, porque hemos albergado mucho más de lo que se nos estaba pidiendo. Al margen de frases que yo creo que a lo que contribuyen es a poco ahora mismo. Ahora de lo que se trata es de ser serios, de ser responsables", ha asegurado Mazón, quien gobierna con Vox en la Comunidad Valenciana.
El PP acepta una reubicación puntual, pero rechaza mantenerlo en el tiempo
La negociación sobre la reubicación de los menores no acompañados se está jugando a dos bandas. En la conferencia sectorial del miércoles, el Gobierno hará una propuesta a las comunidades autónomas para repartir a los 6.000 niños que en estos momentos se encuentran en Canarias.
Según ha podido saber laSexta, el PP sí aceptará esta reubicación puntual, pero, en cambio, están en contra de la reforma de la ley de extranjería que el PSOE quiere llevar al Congreso. Una propuesta que pretende fijar un sistema de reparto permanente entre las autonomías cuando los centros de acogida de menores de Canarias, Ceuta y Melilla superen cierto nivel de sobreocupación.
Además, la ultraderecha ha ido más allá en su discurso antimigración y ha propuesto que la policía de Ciudad Real haga controles domiciliarios para evitar la migración masiva. Los agentes realizarían esas inspecciones casa por casa, según dicen desde la formación ultra, para acabar con los empadronamientos ilegales y frenar el efecto llamada. Los colectivos antirracistas de la ciudad creen que esto fomenta el odio y que es bochornoso.