El presidente de Canarias, Fernando Clavijo, ha asegurado sentirse "decepcionado con el PSOE" y "engañado" porque, según ha denunciado, han hecho pública una reunión a tres con el PP por la crisis migratoria, que los socialistas pidieron que fuera "discreta", aunque se ha mostrado confiado en que habrá un acuerdo entre el Gobierno y el principal partido de la oposición. Asimismo, ha dejado atrás la sintonía mostrada con el Gobierno y le ha culpado de que no se haya llegado a un acuerdo para reformar la Ley de Extranjería, lanzando una pequeña crítica a los 'populares' por no abstenerse o votar a favor de la misma.

Así lo ha señalado Clavijo en sus entrevistas en El País y Cadena Ser, apuntando que fue el ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, con quien dice que "la confianza se ha quebrado", reclamó tener "una reunión discreta" el 12 de agosto entre el Gobierno central, el Ejecutivo canario y el PP. Una reunión que se planteó con el objetivo de "quitar presión política al asunto y que esto no sea un problema político".

No obstante, ha amenazado al Ejecutivo con retirarle el apoyo parlamentario si no encuentra una solución. "El PSOE tiene que ponerse manos a la obra con este asunto, porque si no, esto puede quebrar y ante los incumplimientos nos veremos totalmente liberados de votar lo que decidamos", ha afirmado.

Sorbe la afirmación del PP de que había un principio de acuerdo para que sea el Estado el que hiciese cargo de los menores si superaban el 150%, ha afirmado que sí lo hubo que se dijo que "el Estado se haría cargo de los gastos cuando superasen el 100% de lo presupuestado". "Fue el ministro Torres quien pidió que esa reunión se celebrase con estricto sigilo para facilitar el acuerdo", ha sostenido.

"Por respeto, no voy a hablar del contenido, pero hay un acta que levanté yo mismo y estuvieron conformes con ella. Estoy profundamente decepcionado con el PSOE, porque el lunes último, en la reunión del pacto migratorio en el Parlamento canario, el portavoz socialista desveló la reunión. Me siento engañado y cuando la confianza se rompe es complicado reconstruirla", ha sostenido.

Además, ha pedido al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, "que busque el acuerdo y se siente con el PP, que no solo es el grupo mayoritario, es el que gobierna la mayoría de las comunidades". Cabe recordar que fue el PP quien votó en contra del reparto obligatorio de menores migrantes, partido que gobierna con Clavijo, ha sostenido que "una cosa es el Gobierno de Canarias y otra los grupos políticos".

"No nos enfrentamos al Estado"

El presidenta canario ha subrayado que "en ningún momento" el Gobierno de Canarias se ha negado a "acoger menores". "No nos enfrentamos al Estado", ha recalcado. Clavijo ha pedido expresamente que el Gobierno de España "se siente con el Partido Popular y con el de Canarias", a la vez que ha afeado que acuse al PP de "estar mareando la perdiz" con la migración "introduciendo permanentemente nuevas condiciones y eso no es cierto".

El presidente canario ha enviado una carta a la presidenta del Parlamento Europeo, Roberta Metzola, en la que solicita comparecer para exponer la emergencia migratoria de Canarias y ha indicado que considera necesario que la Agencia Europea de la Guardia de Fronteras y Costas (Frontex) "debe desplegarse, sobre todo porque ayuda a detectar y salvar vidas".

En este sentido, ha añadido que las instituciones europeas no pueden dejar "sola" a su comunidad autónoma, al tiempo que ha recordado que lleva "un año reivindicando lo que está ocurriendo" con la migración. "A fecha de 31 de agosto, hemos más que duplicado las llegadas del año anterior", ha expuesto Clavijo, añadiendo que, si se aplica ese baremo para las previsiones "podemos acabar el año con más de 60.000 migrantes". En la actualidad, el Gobierno de Canarias calcula que "aproximadamente hay 5.500 menores en Canarias".

Para Clavijo, la isla de El Hierro "ya no tiene espacio para menores en las ubicaciones actuales", lo que supone que en atención inmediata se vean residiendo en carpas "porque no hay capacidad". Por último, ha asegurado que no van "a dejar a los menores abandonados ni tirados" pero van a "discutir con el Estado" sobre "quién va a tener que asumir la responsabilidad de la integración del menor".