Ratifican la decisión

Confirman la pena de 15 meses de prisión a Cristina Seguí por publicar el vídeo de las menores de Burjassot

El contexto La fundadora de Vox difundió un vídeo en el que tres menores denunciaron una violación grupal en la localidad valenciana y desmintió su versión.

Cristina Seguí, en el juicio producido en junio de 2024

La Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Valencia ha confirmado la pena de 15 meses de prisión impuesta a la fundadora de Vox y actual presidenta de Gobierna-te, Cristina Seguí, por publicar un vídeo en el que aparecen tres menores que denunciaron una violación grupal en Burjassot.

La Audiencia considera que Seguí es responsable de un delito contra la integridad moral, por el que se le impuso la referida pena de prisión y una indemnización de 12.000 euros para la madre de una de las menores, pero la absuelve del de revelación de secretos y por tanto la exime de la correspondiente multa (diez euros diarios durante tres meses).

La sentencia considera probado que Seguí publicó en su cuenta de X un vídeo realizado y publicado en Instagram por tres menores con las caras cubiertas por un filtro (para sus seguidores privados y con una duración de 24 horas) en el que comentaban que se iban a hacer famosas e iban a salir en la televisión con motivo de una agresión sexual que habían padecido en Burjassot.

Este caso de violencia sexual fue denunciado en mayo del año pasado y cuatro de los cinco autores aceptaron penas de entre tres y cinco años de internamiento. La acusada lo difundió en su propia página de Twitter, que contaba con 200.000 seguidores, acompañándolo de un texto en diagonal en la imagen con su nombre, y del siguiente texto: "Está todo mal, no es una niña de 12 sino de 15 o 16, el sexo fue acordado y consentido y lo hicieron para hacerse famosas en TV gracias a medios de difusión como vosotros".

El vídeo fue eliminado de las redes sociales a requerimiento de la Agencia Estatal de Protección de Datos, y hoy los enlaces están deshabilitados. Como consecuencia de la violación, la menor padece estrés postraumático agravado por la difusión del video, hubo de cambiar de centro escolar porque fue reconocida por muchos compañeros y señalada como protagonista de los hechos referidos, y recibe tratamiento psicológico, presentando un perfil completamente desajustado para su edad y desarrollo, y con un posible futuro deterioro en su salud mental, según se hace constar en los hechos probados, que no han sido cuestionados por la Audiencia Provincial.