El Congreso ha convalidado este miércoles el decreto por el que se establece el Ingreso Mínimo Vital (IMV), con el apoyo mayoritario de la Cámara, solo la abstención de Vox y ningún voto en contra.
La medida ha salido adelante finalmente también con el 'sí' del PP, tras mantener su voto en el aire hasta casi el último momento, así como con el apoyo de los socios de investidura del Gobierno y el de Ciudadanos y Junts per Catalunya.
En concreto, la medida se ha aprobado con 297 votos a favor y solamente la abstención de los 52 diputados de Vox. La formación de extrema derecha ha optado por la abstención tras posicionarse reiteradamente en contra de esta prestación, a la que atribuyen un supuesto "efecto llamada" a la inmigración, a pesar de que para beneficiarse de ella es necesario residir legalmente en España desde hace al menos un año.
Terminado el turno de votación, la mayoría de los diputados y diputadas presentes en el parlamento han estallado en aplausos, ante la aprobación de una de las medidas que más apoyo ha originado.
Muchos de ellos, en sus discursos previos, han mostrado su alegría e incluso felicidad por sacar adelante el decreto. "Tenemos que estar felices porque estamos haciendo dando respuesta a una situación desigualdad", remarcaba la socialista María Luisa Carcedo.
Vox se pasa a la abstención en el último momento
Aunque los del partido que lidera Santiago Abascal mantenían su 'no' a la medida hasta la tarde, y desde la tribuna la han catalogado de "auténtico caos" y "cajón de sastre", en el último momento han anunciado la abstención.
"No vamos a votar en contra, porque nuestros compatriotas nos necesitan, pero no vamos a votar a favor, porque no queremos participar de esta locura", ha expresado la diputada María de la Cabeza Ruiz Soládes de la tribuna, al tiempo que desde los perfiles oficiales del partido anunciaban su abstención.
Además, han considerado que el pacto "firmado con el diablo", refiriéndose a Pablo Iglesias, "va a salir muy caro porque al diablo le da igual que se pone en riesgo de muerte el sistema de protección".
El PP vota 'sí'
En cuanto al apoyo del PP, ha sido otra de las sorpresas de la jornada, tras un pleno con nuevos cruces de reproches entre el Ejecutivo y los populares. La formación de Pablo Casado, que se movía entre la abstención y el 'sí', finalmente ha votado a favor de la medida, dirigida a paliar la pobreza en España.
"La renta básica para proteger los más vulnerables es un invento del PP". Este ha sido el argumento principal que los 'populares' han ido esgrimiendo desde que anunciasen que no votarían en contra de esta prestación, que en el 2018 tildaban de "ocurrencia populista".
"Es una imitación de medidas que el PP ha aprobado"
Y es que, el partido que lidera Pablo Casado considera ahora que es una medida que "imita" a otras que desarrollan algunas de las Comunidades Autónomas que gobiernan. "Es una imitación de las medidas que el PP ha aprobado y gestiona en comunidades autónomas", defendía hace unos días Cuca Gamarra.
"El mayor avance en derechos sociales"
La prestación la han defendido desde la tribuna antes de la votación el ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, y el vicepresidente de Derechos Sociales, Pablo Iglesias, que ha calificado al IMV como "probablemente el mayor avance en derechos sociales desde la ley de dependencia". El vicepresidente segundo asimismo ha celebrado "que el PP finalmente haya rectificado" y se haya inclinado por el 'sí': "Ojalá sigan caminando en esa dirección hacia los consensos europeos", ha manifestado.
Iglesias, que ha aseverado que ha sido "indignante" escuchar a algunos políticos referirse al IMV como "paguita", asimismo ha expresado que "la mejor manera de ser patriota no es envolverse en una bandera, sino asumir lo que significa el interés general" y ha asegurado que su aprobación no es un éxito del Gobierno, sino de la sociedad civil. "No es un éxito mío ni de Escrivá, ni del Gobierno de coalición. Es el triunfo de todos los colectivos que han estado años luchando por la dignidad. A todos ellos, muchas gracias. Sí se puede", ha concluido.
Por su parte, Escrivá ha comenzado su intervención aseverando que España "tiene un problema estructural de desigualdad y pobreza" y que "las transformaciones sociales y económicas nos obligan a repensar las políticas públicas". El titular de Seguridad Social ha definido el IMV como una "norma que corrige un déficit histórico de nuestro estado del bienestar" y ha explicado que la medida tiene dos dimensiones: una "herramienta para la lucha contra la pobreza y palanca para la inclusión social".
En este sentido, el ministro ha insistido en que el IMV engloba "una prestación de gran potencia redistributiva diseñada para combatir de la forma más eficiente posible las formas más extremas de pobreza" y, a su vez, de un "conjunto de políticas para que los beneficiarios transiten desde la exclusión hacia la participación plena en la sociedad"