El Congreso de los Diputados ha rechazado que Pedro Sánchez sea investido presidente en la primera votación de la sesión de investidura. El candidato socialista no ha logrado alcanzar la mayoría absolutanecesaria en esta ocasión para convertirse en presidente del Gobierno de España; un primer intento que tanto él como su partido y sus futuros socios de gobierno sabían que no iba a salir adelante.
Esta primera votación ha avanzado según lo previsto: los miembros del PSOE, Unidas Podemos, Más País, Compromís, BNG, Nueva Canarias y Teruel Existe han apoyado la investidura de Sánchez, frente al rechazo del Partido Popular, Ciudadanos, Vox, Coalición Canaria, Navarra Suma, Junts per Catalunya, la CUP, Foro Asturias y PRC. Por su parte, los diputados de ERC y EH Bildu se han abstenido.
En total, 349 votos: 166 'síes' frente a 165 'noes' y 18 abstenciones. Además, Sánchez ha logrado un voto menos en la votación por la indisposición de Aina Vidal, diputada de los comunes. La atención de los grupos parlamentarios de la cámara se centra ahora en el resultado que salga el próximo martes, 7 de enero, fecha en la que tendrá lugar la segunda votación de la sesión de investidura. Cuando se produzca, Sánchez sólo necesitará una mayoría simple para ser investido presidente; una mayoría que se le ha complicado en las últimas horas.
Si recientemente el Partido Regionalista Cántabro desveló que votaría en contra de Sánchez tras conocer el contenido del acuerdo al que llegaron los socialistas con Esquerra Republicana, la sorpresa en la primera jornada de la sesión de investidura la dio Ana Oramas. La diputada de Coalición Canaria, en contra de lo previsto, anunció que votaría 'no' a Sánchez, lo que hizo saltar las alarmas tanto en la formación canaria como en el PSOE.
La dirección de Coalición Canaria, que previamente había aprobado conceder su apoyo a los socialistas, explicó poco después que tomaría medidas por la acción de la diputada. "Coalición actuará con sus estatutos para las indisciplinas que se produzcan por cualquier militante del partido.Y máxime cuando la decisión ha sido por unanimidad de nuestro máximo órgano". Este giro de los acontecimientos provoca que Sánchez llegue a la segunda votación con las cuentas muy ajustadas, porque el rechazo de un solo diputado más provocaría que fracase de nuevo su investidura como presidente del Gobierno.