El Congreso de los Diputados ha votado a favor de la proposición de ley para derogar el delito de sedición, modificar el de malversación y cambiar las mayorías para desbloquear la renovación del Tribunal Constitucional (TC). Todo ello a través de la reforma del Código Penal.
Con 184 votos a favor, 64 en contra y una sola abstención, esta reforma propuesta por el Gobierno ha salido adelante.
La votación se ha desarrollado en un tono muy bronco. Los diputados de Vox y Ciudadanos han decidido abandonar la cámara tras pedir, junto al Partido Popular, que se suspenda la sesión. Ha habido un receso y tras ello ha dado comienzo la votación en la que no han participado ni los de la formación naranja por considerarla "ilegítima" ni el Partido Popular, aunque se han mantenido presentes en la sesión.
Inés Arrimadas, líder de Ciudadanos, ha comparado la reforma del Gobierno con el 'procés': "Van a aprobar leyes inconstitucionales en 48 horas y vulnerando todos los trámites", ha denunciado, asegurando que "el separatismo no tendrá que declarar la independencia, porque la hará de facto el Gobierno". Además, Arrimadas ha pedido al líder del PP que presente una moción de censura.
La portavoz de los 'populares', Cuca Gamarra, ha acusado al Gobierno de "mimetizarse con los que dieron un golpe de estado en Cataluña en 2017". "Esto es hacer un código penal para personas con nombres y apellidos: Oriol Junqueras, Jordi Turull, Carme Forcadell, Forn, Rull, Rovira...".
Por parte de Vox, Javier Ortega-Smith ha declarado que los objetivos del Gobierno a la hora de legislar es "encubrir a los golpistas, derogando el delito de sedición y favoreciendo que vuelvan incurrir en él; reduciendo la pena a los corruptos, el control político definitivo del Poder Judicial rebajando la mayoría...". Así, ha acusado a Pedro Sánchez de dar un "golpe institucional".
También ha habido enfrentamientos entre los grupos independentistas. Los de Junts, que no están de acuerdo con la reforma porque se sigue considerando un delito las actuaciones de los líderes del 'procés', han cargado duramente contra ERC y su portavoz, Gabriel Rufián. "Nosotros vamos a votar no a esta ley porque no somos delincuentes", le ha recriminado Josep Pagès.
Preguntado por estos rifirrafes, Gabriel Rufián, portavoz de ERC ha declarado que los de Junts "generan ruido que alejan a la gente normal". En su turno de palabra, en el que ha defendido esta modificación penal de los delitos de sedición y malversación, Rufián también ha sido muy polémico: "Tengo miedo a que entre Tejero con toga, porque ya no entran con pistola, entran con togas", ha dicho.
Todos estos cruces de acusaciones han molestado visiblemente a la presidenta de la Mesa, que pese a sus continuas llamadas al orden y peticiones de silencio no ha sido capaz de frenar los gritos que llegaban de algunas bancadas mientras algún diputado se encontraba en el uso de la palabra desde la tribuna. "La falta de respeto a los servicios de esta Cámara es intolerable", ha declarado Meritxell Batet.
En esta sesión ha sido notable la ausencia del presidente del Gobierno, motivo que ha suscitado críticas entre algunos grupos. Pedro Sánchez se encuentra este jueves en una cumbre oficial de la Unión Europea en Bruselas, un evento al que siempre acuden los presidentes del gobierno.
Alusiones al 23F que encienden al PP
Durante los momentos de debate previos a la votación, el diputado de Unidas Podemos, Jaume Asens, ha criticado al PP por haber intentado "usar el TC con el mandato caducado para sustituir la voluntad del Parlamento". Se refería al hecho de que el Partido Popular haya pedido al Constitucional que se pronuncie sobre la reforma que afecta a la renovación de este órgano judicial.
"Aunque no hayan dejado agujeros aquí arriba, ustedes han tratado de dar un golpe silencioso", ha añadido Asens, en referencia al 23F. Y con un planteamiento similar se ha pronunciado Felipe Sicilia, diputado socialista: "Hace 41 años la derecha quiso parar un Pleno del Congreso y parar la democracia. Lo hizo con tricornios. Hoy la derecha ha vuelto a querer parar un Pleno". Sus declaraciones han suscitado un gran revuelo en el Hemiciclo.
Estas alusiones han encendido los ánimos en la bancada del Partido Popular. Por alusiones, Cuca Gamarra ha pedido turno de palabra para responder: "El 23-F en este país gobernaba el centro-derecha cuando se produjo... Por lo tanto, revisen la historia, no podrán cambiar el futuro. Qué vergüenza, señores socialistas, si les escucharan los antiguos socialistas".
El Constitucional aplaza su decisión al lunes
El resultado sobre la reforma para renovar el Poder Judicial en el Congreso de los Diputados llega el mismo día en el que el Tribunal Constitucional se ha visto obligado a aplazar -hasta el lunes de la semana que viene- el pleno extraordinario convocado de urgencia por el sector conservador ydestinado a determinar si frenan o no la reforma del Gobierno para la renovación de este (el TC) y otros órganos del Poder Judicial.
El Partido Popular recurrió al Constitucional para frenar esta reforma con medidas cautelarísimas al considerarla "anticonstitucional", "ilegal" y "de una manifiesta antijuricidad".
Su intención era la de que el Constitucional se pronunciase antes de que este jueves por la tarde, pero el pleno se ha pospuesto porque cinco magistrados han pedido más tiempo para estudiar la documentación. Esto no supone un problema en el trámite de la reforma, puesto que después de aprobarse en el Congreso debe pasar su trámite por el Senado, por lo que hay tiempo, si así lo considerase el Constitucional, para frenarla. El Senado votará previsiblemente esta reforma el próximo día 22 de diciembre.