Cristina Cifuentes se quejaba de que no existía un reclamo social cuando el PSOE cambió la ley del aborto y que no había necesidad, pero para defender una ley que sí le gusta, la cosa cambia.
“De las 8.000 manifestaciones, solo ocho se ha tenido que intervenir los disturbios”, declaraba Cifuentes sobre la actuación policial en las manifestaciones. Aunque, según ella, la policía solo ha intervenido en ocho ocasiones, la Ley de Seguridad Ciudadana es necesaria y da más motivos.
Era su regreso después de tener un accidente de moto y había muchos temas sobre la mesa y uno de ellos, el registro de la policía, durante 14 horas a la sede de su partido.
Más claro habla para descartarse como sucesora de Ana Botella: “ni he estado ni voy a estar carrera”, declaró la portavoz. A su antecesor, Alberto Ruiz Gallardón, le pedía explicaciones por implantar la Píldora del día después.
Volvió a mostrarse crítica con la ley del aborto que se está impulsado, asegura estar a favor de una ley de plazos y que si fuera diputada tendría dudas sobre qué votar.
Aunque ella asegura que esta reforma necesita el máximo consenso, sus declaraciones muestran que no lo hay ni dentro de su partido.