La ministra de Sanidad, Carolina Darias, ha señalado este viernes que ellote de AstraZeneca retirado en otros países por supuestos episodios trombóticos y que está siendo investigado ya fue suministrado y administrado en España por lo que "no se trata de parar un lote que no tenemos".
En una entrevista en RNE y a la pregunta de si se activará un seguimiento específico de las personas inoculadas con esa partida, Darias ha explicado que el Ministerio y la Agencia Española del Medicamento hace un seguimiento de farmacovigilancia "permanente" desde que se administra cualquier vacuna por lo que no se pondrá en marcha ningún proceso concreto porque el que hay es ya "muy potente".
Darias ha insistido en que la vacuna de AstraZeneca es "segura" y así lo dice la Agencia Europea del Medicamento (EMA), que ha puesto de manifiesto que "no hay relación causal entre el evento trombótico y la vacuna en sí".
Por tanto, ha reiterado el mensaje de "prudencia y tranquilidad"y máxima vigilancia.
Andalucía y Castilla y León frenan las vacunaciones
Algunas comunidades, sin embargo, ya han comenzado a paralizar las inmunizaciones con este suero. La Consejería de Salud y Familias de la Junta de Andalucía ha decidido inmovilizar un lote de 1.200 vacunas contra el COVID-19 de AstraZeneca.
Según ha explicado el titular andaluz de Salud, Jesús Aguirre, durante un desayuno informativo organizado por diario Córdoba, la Junta ha decidido mantener ese lote de 1.200 vacunas de AstraZeneca en "stand by" hasta conocer la resolución definitiva de la Agencia Europea del Medicamento.
También Castilla y León ha decidido paralizar estas inyecciones con el lote investigado, igual que Cataluña. Según un comunicado del Gobierno regional, esta decisión se toma atendiendo al principio precaución que ha de regir ante este tipo de situaciones, aunque en la región no se ha registrado ningún efecto adverso grave por la inoculación de este tipo vacunal ni de las otras vacunas autorizadas.
Darias pide "un tiempo de espera"
Respecto al hecho de que la EMA se haya dado 14 días para establecer una recomendación general sobre la vacunación de AstraZeneca y si España finalmente la va a aplicar a mayores de 55 años, Darias ha dicho que el Gobierno se dará "un tiempo de espera" en función de lo que diga la EMA "y a partir de ahí actuaremos".
Según decidió a mediados de febrero la Comisión de Salud Pública, la vacuna de AstraZeneca se está administrando a trabajadores esenciales menores de 55 años (bomberos, docentes, policías y algunos sanitarios no de primera línea, entre otros), a los que seguirá la población general entre 45 y 55 años.
La ministra también se ha referido a la vacunación de la población infantil y ha señalado que mientras no haya ensayos clínicos ni evidencias "no se puede proceder a esa vacunación" y ha recordado que la ficha técnica de la EMA es a partir de los 18 años.
En el caso de las embarazadas, Darias ha considerado que, de momento, solo se llevará a cabo bajo prescripción médica.
AstraZeneca niega que las trombosis tengan relación con su vacuna
Por su parte, AstraZeneca ha asegurado este viernes que no ha encontrado pruebas de que la vacuna contra el coronavirus produzca un mayor riesgo de trombosis.
"Un análisis de nuestros datos de seguridad de más de 10 millones de registros no ha mostrado evidencia de un mayor riesgo de embolia pulmonar o trombosis venosa profunda en cualquier grupo de edad definido, el género, el lote o en cualquier país en particular con la vacuna", ha dicho un portavoz de la compañía.
Un sindicato policial pide un seguimiento
Por su parte, el sindicato Unión Federal de Policía (UFP) ha mandado una carta a la Directora general de la Policía ya que, dicen, el lote en cuestión se le ha administrado a algunas Unidades de Intervención Policial.
"Solicitamos que, en el caso de que queden vacunas referenciadas con este lote, se comunique al Ministerio de Sanidad para dejar de administrarlas, al mismo tiempo que solicitamos información de los efectos y consecuencias de la administración de la vacuna de referencia en la Policía Nacional", reza el comunicado, que también pide un "seguimiento exhaustivo" a los vacunados.