Crema de zanahorias, pollo al ajillo y mandarina. Es uno de los menús que van a comer los más de 8.000 niños que durante los dos últimos meses se han alimentado con pizzas, sandwiches y poco más.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, da así marcha atrás y vuelve a contratar a las empresas de catering que pararon tras decretarse el estado de alarma por el COVID-19.
Las familias receptoras de la ayuda celebran el cambio. "Es una comida saludable y una comida casera", explica una de las madres al recoger el menú. "Mucho mejor que la hamburguesa y la pizza", añade otra de las madres.
laSexta ha tenido acceso al ménu elaborado por una de las empresas contratadas por el Gobierno de Ayuso. Así, los niños recibirán mañana martes ensaladilla rusa, rotti de pavo asado y yogur o judías blancas estofadas y tortilla de patata, en los siguientes días:
"Son menús con los nutrientes adecuados, con la composición calórica adecuada, con fruta, verdura, pasta, pescado...", explica a laSexta Antonio Lence Moreno, director general del Grupo Viena Capellanes.
Nada que ver con las hamburguesas, pizzas o fingers de pollo con Coca-Cola que estuvieron recibiendo en los últimos días. Una solución pensada como temporal por el Ejecutivo regional que se alargó en el tiempo provocando las protestas de las familias y los nutricionistas.
"Aportan muchísimas calorías, pero muy pocas vitaminas y minerales", afirmó un experto en alusión a los polémicos menús. Una alimentación que la propia Díaz Ayuso defendió en la Asamblea de Madrid el pasado 29 de abril: "Dicen que si yo les daría esta comida a mis hijos, no creo que darle una pizza a un niño sea un problema".