Rajoy ha defendido el mismo mensaje que la que era su vicepresidenta del Gobierno, Soraya Sáenz de Santamaría, y ha dicho que hablaron con los independentistas, pero nunca de negociar un referéndum de autodeterminación para Cataluña.
El expresidente del Gobierno ha señalado que eso sería como "liquidar la ley, la Constitución y la soberanía nacional".
Sáenz de Santamaría ha incidido en los incidentes violentos que, según ella, se produjeron durante el 1-O y en la Conselleria de Economía. Ha señalado que hubo acosos violentos a la Comisión Judicial que intentaba registrar esas instalaciones.
Importantes también las declaraciones de los miembros del Gobierno del PP en relación a la malversación. Rajoy y el exministro Montoro han dejado abierta la posibilidad a que se produjera un ocultamiento por parte de la Generalitat de ciertas partidas presupuestarias.