Fuentes de la investigación explicaron que las indagaciones demuestran que se trataría de "un operativo realizado por encargo", según informa El Periódico.
La investigación de las identidades ha permitido unir los vínculos de dos de los asaltantes a la embajada con la CIA, la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos, un dato que fue desvelado por el diario El País.
También se tantea la posible implicación en el encargo al servicio secreto de Corea del Sur, NIS, muy vinculado a la CIA.
"No fue un operativo muy costoso de encargar para un servicio secreto: se busca a colaboradores de su confianza, se hace el pago por servicio y se añaden los gastos corrientes, que en este caso fueron pocos: billetes de avión, hoteles, estancia...", ha explicado a El Periódico una fuente de los servicios de inteligencia.
La CIA ha desmentido su participación en el asalto, que amenaza con originar un incidente diplomático por la "deslealtad" que habrían cometido al encargar esa operación "sin avisar", según las mismas fuentes.