Xavier Pericay, uno de los fundadores de Ciudadanos, ha presentado su dimisión como miembro de la dirección nacional, aunque ha desligado su decisión de la negativa del partido a facilitar la investidura del presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, o de los contactos que haya mantenido con Vox.
Pericay, que era el responsable del área de Educación de la ejecutiva de Cs y en la pasada legislatura fue portavoz en el Parlamento balear, ha achacado su decisión a "cuestiones de funcionamiento interno" del partido y "no tanto a la estrategia y a la política de pactos".
"En relación con que si hay o no que pactar con Sánchez, soy de los que creo que no y, por lo tanto, estoy en la línea mayoritaria del partido. En eso, no tengo ningún problema. Mis razones no están vinculadas con esto", ha explicado el filósofo y escritor barcelonés.
Por ello, ha dicho discrepar de Toni Roldán y de Javier Nart, los otros dos miembros de la dirección nacional que dimitieron de sus cargos por el giro ideológico hacia la derecha del partido en los últimos meses. Según el ya exsecretario de Educación de Cs, el no a Sánchez está "perfectamente justificado" y su salida "tiene que ver más con aspectos internos del partido, en especial, en Baleares.
"Son cosas distintas y me importa mucho diferenciarlas", ha añadido para precisar las razones que le han empujado a dejar sus cargos orgánicos en la formación que lidera Albert Rivera. A su juicio, Cs tiene unos principios desde su fundación que "en absoluto se han modificado en ningún momento".
Pericay ha considerado inviable pactar con Sánchez cuando los socialistas van a gobernar con los nacionalistas de Geroa Bai en Navarra. También cree que es un obstáculo insalvable que Sánchez haya nombrado como presidentes del Congreso y el Senado a dos miembros del PSC cuando es "un partido nacionalista dentro del PSOE".