El ya exprocurador del PSOE en las Cortes de Castilla y León Ángel Hernández, detenido la noche del lunes tras gritar y golpear repetidamente la puerta de la vivienda de su pareja, ha anunciado este miércoles que renuncia a todos sus cargos políticos y públicos.
Acusado de delitos de amenazas, acoso, coacciones y maltrato en el ámbito de la violencia sobre la mujer, y atentado o resistencia a agentes de la autoridad, Hernández ha recalcado en un comunicado remitido por el PSOE autonómico que "siempre" ha tratado de actuar con "ejemplaridad" en su vida pública y privada, con la "responsabilidad" de los cargos que ha ostentado.
En el comunicado, Hernández ha agradecido las "numerosas muestras de apoyo públicas y privadas" que asegura que ha recibido desde este martes, y ha agradecido igualmente "el respeto de quienes tratan lo acontecido como algo limitado al ámbito estrictamente privado, que ha derivado en una causa judicial abierta" para la que ha pedido "respeto".
Hernández pasó la noche en los calabozos de la comisaría de Policía, donde declaró por los hechos ocurridos a las 23:30 de la noche de este lunes, según explicó la Subdelegación del Gobierno en Soria.
El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción 3 de Soria, competente en materia de violencia sobre la mujer, acordó la libertad provisional del detenido con la obligación de comparecer cuando se le cite, así como la prohibición de aproximarse a menos de 300 metros de su pareja y de comunicarse con ella por cualquier medio.
El PSOE anunció la suspensión cautelar de militancia de Hernández, secretario general del Grupo Socialista en las Cortes de Castilla y León y procurador por Soria. A través de un comunicado, los socialistas han tomado esta decisión "hasta el esclarecimiento de los hechos", a la vez que han pedido "prudencia y respeto" hacia las actuaciones policiales y judiciales.