Las protestas frente a la sede del PSOE han vivido uno de sus días de mayor afluencia este jueves en la calle Ferraz. Se ha dado una particularidad en este sexto día de movilizaciones y es que se han unido dos manifestaciones en dos zonas distintas de la capital, con un grupo de personas que se han congregado frente al Parlamento Europeo en Madrid moviéndose a Ferraz.
En este caso, se han escuchado cánticos dirigidos a Europa, a la que han pedido "detener la amnistía". En dicha marcha se ha visto a un rostro muy conocido: Cayetana Álvarez de Toledo. La diputada del PP ha acompañado a esta movilización, convocada por la plataformas Libertad sin Ira, Pie en Pared, S'ha Acabat!, Neos, Voces Libres, Con la Libertad y Revuelta (Vox).
Pero de nuevo ha sido Ferraz el lugar en el que los manifestantes han encontrado un lugar común para protestar contra la ley de amnistía. Allí también había otro rostro conocido que ya había estado previamente en las marchas. El líder de Vox, Santiago Abascal, se ha manifestado en un día en el que ha cedido el protagonismo a otros, juntándose entre los miles de personas que se han congregado en Madrid.
"Hay que aguantar la movilización, hay que sostenerla todo el tiempo que haga falta", ha pedido Abascal, que asegura que estamos en "el periodo más negro de nuestra historia". "Tenemos el deber de resistir a un Gobierno y a un tirano", ha añadido.
Según Delegación de Gobierno, a la manifestación de este jueves han acudido 8.000 personas, el día que mayor número de personas se han congregado. Desgraciadamente, los disturbios han vuelto a hacer acto de presencia, con la Policía obligada a cargar contra radicales que han lanzado objetos a los agentes.
Previamente, los ultras han realizado saludos fascistas, insultando reiteradamente a los agentes. Tras lanzar cristales a la Policía, los agentes han intervenido para dispersar a los radicales. Al menos se han producido 15 detenciones por estos altercados.
Acuerdo cerrado entre PSOE y Junts
Todas estas protestas se han juntado en un día clave para la conformación del nuevo Gobierno del país. En la mañana de este jueves, PSOE y Junts han oficializado su acuerdo para que la formación independentista dé su apoyo a Sánchez, un acuerdo que, según los socialistas, es "de legislatura", no solo de investidura.
El número tres del PSOE, Santos Cerdán, ha detallado que su acuerdo recoge que la ley de amnistía cubra a la gente relacionada con el procès desde sus inicios, en 2012, hasta la fecha de ayer, especificando que la "línea roja" del PSOE es la Constitución.
Carles Puigdemont también ha comparecido, defendiendo que la amnistía "no puede excluir las víctimas de la guerra sucia que el Estado español ha lanzado contra el independentismo desde hace años".
"Las víctimas tenemos derecho a saber la verdad. Y tenemos el derecho no solo a que se nos repare la injusticia de una persecución política denunciada por organismos internacionales, sino a que esto no vuelva a ocurrir", ha asegurado.
Los puntos clave de la investidura
El documento de cuatro páginas al que ha tenido acceso laSexta recoge la intención de PSOE y Junts de "abrir una nueva etapa" que pueda "resolver el conflicto histórico sobre el futuro político de Catalunya".
Dicho acuerdo incluye la futura ley de amnistía, que debe incluir "tanto a los responsables como a los ciudadanos que, antes y después de la consulta de 2014 y del referéndum de 2017, han sido objeto de decisiones o procesos judiciales vinculados a estos eventos".
"Junts propondrá de entrada una modificación de la LOFCA que establezca una cláusula de excepción de Catalunya que reconozca la singularidad en la que se organiza el sistema institucional de la Generalitat y que facilite la cesión del 100% de todos los tributos que se pagan en Catalunya. Y, por su parte, el PSOE apostará por medidas que permitan la autonomía financiera y el acceso al mercado de Catalunya, así como un diálogo singular sobre el impacto del actual modelo de financiación sobre Catalunya. En este ámbito, también se abordarán los elementos esenciales de un plan para facilitar y promover el regreso a Catalunya de la sede social de las empresas que cambiaron su ubicación a otros territorios en los últimos años", agregan.