Tras el paso de la DANA que ha afectado gravemente a varias localidades de la Comunidad Valenciana, el presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, comparecerá este viernes en Les Corts para dar explicaciones sobre la gestión de la crisis, una actuación que ha sido objeto de duras críticas y controversias.

Mazón, que en el pasado fue un crítico acérrimo de las respuestas tardías de los funcionarios en situaciones de emergencia, parece encontrarse ahora en el ojo de la tormenta. Como presidente de la Diputación de Alicante en su día, no dudó en recriminar al portavoz socialista por llegar tarde a una reunión del Centro de Coordinación Operativa Integrada (CECOPI) tras una DANA similar: "Tres horas después de la reunión apareció", reclamó entonces, señalando que la alerta se conocía desde hacía "seis días". Hoy, no parece dispuesto a asumir responsabilidades políticas, a pesar de que en casos anteriores exigió a su predecesor, Ximo Puig, hacer lo propio tras un incendio en la región.

Las incógnitas sobre su futuro y los cambios en su equipo han avivado el debate. Se especula con una posible remodelación de su gobierno, en la cual su vicepresidenta, Susana Camarero, podría salir reforzada, asumiendo las labores de reconstrucción en las zonas afectadas. Sin embargo, hay voces que apuntan a que podrían 'rodar cabezas' en el gabinete. Entre los nombres señalados están los de la consellera de Interior, Salomé Pradas, y la titular de Turismo, Nuria Montes.

Pradas ha sido criticada por su falta de decisiones en los momentos más delicados de la crisis, además de su desconocimiento del sistema de alertas. Según testimonios, fue un técnico quien tuvo que informarle de la existencia del Es-Alert, un sistema que permite notificar a la población ante fenómenos meteorológicos extremos.

Por su parte, Montes ha despertado una fuerte indignación social por su falta de empatía hacia las familias de las víctimas. En una declaración que causó gran revuelo, aseguró que "las familias, en el mejor lugar donde pueden esperar las noticias de sus familiares, es en sus domicilios". Esta falta de sensibilidad se suma a sus controvertidas opiniones sobre el cambio climático, al que en una ocasión calificó de beneficio para la economía: "Si algo bueno trae el cambio climático es la extensión de la temporada turística", dijo en referencia al impacto positivo en el turismo valenciano.