El Gobierno ha mostrado su firme oposición al 'pin parental', que fomenta la educación la carta que defiende Vox y ha remitido al Ejecutivo de Murcia un requerimiento.
En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la ministra de Educación, Isabel Celaá, ha advertido de que se trata de un claro instrumento de "censura educativa" que "vulnera el derecho fundamental de los niños a ser educados".
En esta línea, Celaá ha añadido: "No podemos pensar que los hijos pertenecen a los padres, hay derechos fundamentales del menor".
Tras sus palabras, el Partido Popular no ha tardado en contestar duramente y Teodoro García Egea ha arremetido contra la ministra de Educación.
"Qué barbaridad, señora Celaá. ¿Cómo que los hijos no pertenecen a los padres? A quien no pertenecen es a usted, ni a la señora Montero, ni al señor Sánchez", ha denunciado el secretario general del PP.
García Egea ha defendido que el 'pin parental' se aplica para evitar el "adoctrinamiento" porque "los padres deben elegir la formación moral que se da a los hijos".
"Más libertad y menos imposición es lo que recomiendo al señor Pedro Sánchez y a la señora Isabel Celaá", ha añadido.
Además, el Partido Popular ha pedido la comparecencia de Celaá porque considera que pretende "recortar los derechos y libertades de las familias en España". Así lo ha explicado Sandra Moneo, portavoz adjunta de la formación.
"La ministra lleva semanas haciendo unas declaraciones que ponen en cuestión permanentemente los derechos y libertades de las familias en relación con la educación de sus hijos. Somos partidarios de la libertad de las familias a que sus hijos reciban la formación religiosa y moral conforme a sus propias convicciones", ha justificado Moneo.