El pleno del Tribunal Constitucional ha considerado nula, por inconstitucional, la ley del referéndum catalán de independencia del 1 de octubre, que ya había sido suspendida cautelarmente el pasado 7 de septiembre y que ahora es privada de cualquier legitimidad en una sentencia definitiva.
El fallo, adoptado por unanimidad, acepta el recurso del Gobierno contra la norma aprobada por el Parlament, que motivó la posterior convocatoria del 1-O.
En su recurso el Ejecutivo subrayaba la extraordinaria relevancia constitucional de sus impugnaciones ante una "de las mayores afrentas de la Constitución española que por parte de un Parlamento autonómico se puede concebir en un Estado democrático y de derecho".