La Gran Vía de Barcelona se ha convertido en una ratonera de humo y fuego durante las últimas horas de la tercera jornada de protestas tras la sentencia del procés.
La marcha que han convocado los CDR y que ha comenzado de forma pacífica en la arteria de la ciudad, se ha retornado en un enfrentamiento entre manifestantes y fuerzas de seguridad del Estado en las últimas horas del día.
Los Mossos d'Esquadra han asegurado que los manifestantes han llegado a lanzar piedras y objetos con ácido. Incluso han ardido vehículos y todo tipo de material mobiliario en forma de barricada.
El lanzamiento de objetos ha sido constante y las llaman han llegado a superar los tres metros de altura después de que las barricadas fueran alentadas con todo tipo de objetos.
Según los agentes, la violencia ha aumentado durante la tercera jornada de protestas, a pesar de que se ha desarrollado de forma pacífica durante la mayor parte del día. La Conselleria de Interior se ha convertido en el punto más complicado de la capital catalana. Allí, algunos manifestantes incluso han hecho uso de tirachinas para arrojar contra los agentes cristales, piedras y diversos objetos.