Los candidatos a las elecciones generales del 10N apuran las últimas horas antes del debate televisado de esta noche, el primero y único con los cinco principales líderes en esta campaña.
La estrategia de Pedro Sánchez pasará por resaltar su perfil presidencial y mostrarse como "el presidente experimentado, firme, sereno, que sabe gestionar, con marcado carácter social y con prestigio internacional", según fuentes socialistas. Su objetivo: conseguir el voto de los indecisos antes de la cita con las urnas este domingo.
El presidente del Gobierno en funciones y su equipo tienen claro que el debate de esta noche será un "todos contra Sánchez", por lo que el secretario general del PSOE se centrará en retratar "el bloqueo de todos" frente a su apuesta por "un Gobierno fuerte, progresista y unido". Sánchez, que ha estado preparando el debate en contacto permanente con el comité electoral y, principalmente, junto a su asesor Iván Redondo, defenderá que su partido es el único con un proyecto para España, frente al resto de candidatos que, dicen en Ferraz, solo tienen el objetivo de frenar al PSOE.
En el PSOE saben que será un "todos contra Sánchez" y en el PP reconocen que Casado ha endurecido el tono ante la subida de Vox en los sondeos.
Admiten que Sánchez es el que más arriesga y sobre las últimas encuestas, creen que probablemente estén mejor de lo que marcan los sondeos, pero que esta semana tienen que visibilizar que no hay otra cosa enfrente, que " Cs está hundido, Podemos va a la baja y el PP, estancado".
En Génova, en cambio, y a diferencia del resto de partidos, impera el secretismo en torno a cuál será la estrategia de Pablo Casado para el debate, cuyas claves los populares tampoco han querido desvelar.
El candidato del PP participó el domingo en una comida familiar y aprovechó la tarde para estudiar de cara a su intervención. A pesar de que antes del 28A sus asesores tuvieron que convencerle para que pausara los actos de campaña y preparase el debate, en esta ocasión tanto él como su secretario general, Teodoro García Egea, han despejado la agenda para definir su estrategia.
En este sentido, las duras acusaciones que el líder popular dirigía el domingo contra Pedro Sánchez, al que responsabilizó de la violencia en Cataluña, no fueron casuales. "No es lo que queremos, pero toca, porque Vox está muy fuerte", han reconocido fuentes del partido a laSexta. En este sentido, la formación teme bajar del 20% de apoyo si esta semana prosiguen los disturbios.
Deporte y agendas despejadas
Por su parte, fuentes de Ciudadanos indican que Albert Rivera está preparando el debate "con muchas ganas" junto a su equipo de campaña. El líder de la formación naranja, que se ha reservado algunos huecos para practicar natación y spinning antes de la cita televisada, defenderá las reformas que, a su juicio, necesita España, así como su compromiso de evitar unas terceras elecciones.
En cuanto al candidato de Unidas Podemos, Pablo Iglesias tiene este lunes la agenda libre para preparar el debate, en el que exhibirá un tono moderado y tranquilo e incidirá en los pactos poselectorales que se formarán tras el 10N. En este sentido, Iglesias reiterará la posición de la formación morada, que insiste en formar un gobierno de coalición con el PSOE.
Se desconoce si Rivera hará como en abril, cuando llenó su atril de objetos, pero Iglesias sí llevará una Constitución de bolsillo.
Asimismo, el secretario general de Podemos abordará en su intervención la llegada de una recesión económica e interpelará a sus adversarios políticos acerca de qué medidas tomarían ellos ante la misma. Aunque aún es una incógnita si el líder de Podemos llevará al debate la Constitución de bolsillo en la ya se apoyó en abril, sí es probable que mencione los artículos sociales en los que basa su programa, como acostumbra a hacer en los mítines.
Abascal se estrena en un debate
En cuanto a Santiago Abascal, el presidente de Vox ha pasado el domingo con su familia, "descansando y leyendo", según fuentes de la formación, que resaltan que Abascal se encuentra satisfecho de que, por primera vez, su partido tenga cabida en los debates televisados.
En este sentido, apuntan que el líder de extrema derecha tiene muchas ganas de trasladar su mensaje "sin traductores", lo cual, cree, será su punto fuerte. Aunque repasará junto su equipo algunos puntos y datos, el presidente de Vox preparará el debate principalmente solo, según las mismas fuentes, que indican que en el partido están satisfechos con el lugar que corresponderá a su candidato en el plató durante el debate: en el atril central y entre Iglesias y Sánchez.