La Ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, negó este martes en el Senado que la mitad de la población migrante en España reciba ayudas, "como según el CIS cree la ciudadanía", pues solo el 11% lo hace. Del mismo modo, la creencia general es que el 40% están en paro, pero solo el 16% se halla en tal situación, y subrayó que las llegadas en pateras supusieron el 0,5% de todas las entradas de migrantes.
"Y ustedes hablan de invasión", dijo en respuesta a la senadora de Vox Paloma Gómez, quien le preguntó "qué medidas piensa adoptar contra la inmigración ilegal, habida cuenta que es el principal problema para los españoles". "Las campañas mediáticas de la ultraderecha y los bulos que alimentan han creado un problema que no es tal", pero "los datos oficiales les desmienten", declaró durante la sesión de control al Gobierno.
Según Gómez, el Ejecutivo "se gastó 3.000 millones de euros en 57.000 migrantes irregulares el año pasado". "Hay habitantes en el Hierro que viven en contenedores", prosiguió, cuando "los migrantes se alojan en hoteles". Además, Gómez acusó al ejecutivo de incumplir la ley por acoger a personas de países que no están en guerra como Marruecos, Argelia o Senegal, y exigió "deportaciones masivas" de migrantes irregulares.
A su juicio,"este Gobierno está vendido a los intereses de estados extranjeros y de Bruselas", y con sus políticas de acogida "favorece a las mafias". "La inmigración es el principal problema para el 30,4% de la población española, y (el Gobierno) actúa como negacionistas", afirmó.
"Son ustedes los únicos responsables de la desinformación", respondió la ministra, y acusó a Vox de "distinguir entre refugiados de primera y de segunda". A España "llegaron más de 200.000 ciudadanos de Ucrania por la invasión de Rusia, y eso les pareció bien. Sin embargo, llega una patera con 50 personas procedentes de Mali y piden que les repatriemos", criticó. La Convención de Ginebra mandata a los estados firmantes no hacer distinciones entre personas refugiadas por ninguna razón, recordó. "Me repugna escuchar sus falsedades y bulos", concluyó Saiz.