España abre parcialmente el confinamiento a partir de este lunes con la vuelta al trabajo de los ciudadanos que realizan actividades no esenciales. Desde el 30 de marzo, estos trabajadores se han quedado en sus casas como medida extra de cuarentena ante la propagación del coronavirus en nuestro país.
Fue una medida que anunció el Ejecutivo hace dos semanas, a la vez que anunciaba que estos trabajadores se verían beneficiados de un permiso retribuido recuperable. Este lunes, 13 de abril, esos trabajadores volverán a sus puestos de trabajo.
Los ministros de Sanidad e Interior, Salvador Illa y Fernando Grande-Marlaska, incidieron este sábado en el protocolo sanitario a llevar a cabo por parte de estos trabajadores. El Gobierno repartirá diez millones de mascarillas en los principales nodos de transporte público, unas mascarillas que no serán de uso obligatorio, pero sí recomendado.
Illa insistió en la importancia de que todos aquellos trabajadores que presenten cualquier sintomatología relacionada con el COVID-19, "por leve que sea", deben quedarse en sus casas, al igual que aquellas personas que hayan estado en contacto "estrecho" con alguna persona que haya dado positivo por coronavirus.
Los detalles de estas recomendaciones fueron publicadas por el Ministerio de Sanidad en una amplia guía que se resume en las "tres prioridades" que Illa citó este sábado: distancia interpersonal, lavado de manos e higiene adecuada en lugares públicos y privados.
Entre el resto de -importantes- recomendaciones plasmadas en esta guía, destaca el llamamiento del Gobierno para, en la medida de lo posible, implantar el teletrabajo en aquellas empresas en las que se pueda hacer. Además, se insta a utilizar el transporte privado en lugar del público para aquellos que puedan hacerlo.
¿Qué se puede hacer?
Fernando Grande-Marlaska fue el encargado de aclarar que, pese a esta vuelta al escenario de hace dos semanas, los ciudadanos sólo podrán salir de sus casas para aquellas actividades que sean indispensables, especificadas en el artículo 7 del Real Decreto del pasado 14 de marzo, en el que se implementó el estado de alarma.
Esto significa que los ciudadanos sólo podrán salir de sus casas para adquirir productos de primera necesidad, ir al médico, cuidar de mayores, dependientes o personas con discapacidad y visitar una entidad financiera. Aquellas personas que tengan un perro, le podrán seguir sacando a la calle.
Es decir, la situación no cambia tanto con respecto a lo que había hasta ahora, por lo que la importancia de quedarse en casa sigue siendo vital para evitar la propagación del virus. Illa y Marlaska insistieron también en el mensaje de que España no se encuentra en un periodo de desescalada. No obstante, en las últimas horas se ha podido conocer una nueva limitación que prohíbe todas las obras en edificios en los que haya gente que se pueda cruzar con los trabajadores, con el objetivo de evitar posibles contagios.
En redes sociales, se llegaron a ver varios bulos a lo largo del día en los que se hablaba de fechas que maneja el Ejecutivo para la reapertura de distintas actividades, documentos que fueron desmentidos desde Moncloa.