Primero alegaron una falta de huecos en sus agendas para reunirse con los negociadores del bloque progresista. Después, señalaron que carecían de nombres de magistrados de prestigio del Tribunal de Supremo que quisieran dar el salto al Constitucional. Y, ahora, están a la espera de la visita del comisario de Justicia a nuestro país y de su valoración sobre la situación del Poder Judicial tras cuatro años de bloqueo por la negativa del Partido Popular a renovarlo.
Las excusas del núcleo duro de los ocho vocales conservadores del Consejo General del Poder Judicial, elegidos a propuesta del PP y con el mandato caducado desde hace cuatro años, van cambiando con las semanas con el Poder Judicial situado en la ilegalidad. El órgano de gobierno de los jueces debería haber propuesto el día 13 a sus candidatos a renovar el Constitucional, uno conservador y otro progresista, lo que, junto a los dos progresistas nombrados por el Ejecutivo, habría devuelto la mayoría progresista al Tribunal de Garantías.
Primero los negociadores conservadores no encontraron un rato para reunirse con sus pares progresistas. Después, y a pesar de que la otra parte les presentó una lista de nueve candidatos, alegaron no encontrar candidatos para renovar el Constitucional. Y ahora están a la espera del comisario europeo de Justicia, Didier Reynders, que está de visita oficial en España.
Reynders inició ayer, miércoles, su visita a la capital con una reunión con el ministro de Exteriores, José Manuel Albares, y este jueves afronta una intensa jornada, repleta de reuniones con representantes políticos, asociaciones de jueces, y un paso por el Congreso de los Diputados.
Y lo hará con esa promesa de "animar al diálogo" entre los líderes políticos. El comisario europeo se reunirá con tres ministros -el de Presidencia, Félix Bolaños; la de Justicia, Pilar Llop; y el de Consumo, Alberto Garzón-, mientras que en representación del PP se entrevistará con el responsable de Acción Institucional, el eurodiputado Esteban González Pons.
Al bloqueo en la renovación del CGPJ se une la amenaza de la dimisión de su presidente, Carlos Lesmes, si esta situación persiste. Mientras alguno de esos vocales confía en que la visita de Reynders tenga también un efecto positivo en estas negociaciones internas del CGPJ, este órgano celebra este mismo jueves un pleno en el que volverá a abordar dichos nombramientos, así como el plan de Lesmes para sustituirlo si dimite.