El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, ha asegurado este lunes que Pedro Sánchez "no puede seguir siendo presidente" del Gobierno "desde el punto de vista "ético", "político" y "moral" tras la investigación judicial que afecta a su esposa, Begoña Gómez, cuya actividad profesional está seguro de que conocía el jefe del Ejecutivo.
"Nadie se cree en España que el presidente del Gobierno no supiese las relaciones económicas, empresariales y comerciales de su mujer", ha aseverado Feijóo en una entrevista en Antena 3, donde ha señalado que Sánchez tendrá que dar explicaciones en la comisión de investigación en el Senado porque, según ha dicho, no las ha dado hasta ahora.
Al ser preguntado si van a llamar también al Senado a Begoña Gómez, Feijóo ha indicado que a él no le gusta "meter a la familia del presidente del Gobierno en una Cámara e interrogarle", ya que, según ha subrayado, "el responsable político es el presidente del Gobierno".
Por eso, ha añadido que el PP estará "muy atento al sumario de investigación por corrupción y tráfico de influencias de la esposa del presidente del Gobierno", así como "al volcado de los móviles y al sumario". Es sí, ha dicho que "sorprendentemente todavía no tienen información suficiente del caso Koldo" por si hay "alguna relación entre este caso y el que afecta al "entorno del presidente". "Queda todavía mucho trabajo por hacer", ha exclamado.
Feijóo ha asegurado que él respetará las decisiones que tome la Justicia en este asunto, pero ha señalado que desde el punto de vista ético, político y moral, en su opinión, Sánchez "no puede seguir siendo presidente del Gobierno porque si la sospecha de corrupción ha conllevado un sumario y una investigación a su entorno, a su familia, el responsable político es quien lo ha permitido".
Al ser preguntado entonces si está pidiendo la dimisión de Sánchez, Feijóo ha señalado que en la Unión Europea "no sería posible tener un primer ministro en el que su mujer esté siendo investigada en un juzgado" y ha recordado que Antonio Costa presentó su dimisión como primer ministro de Portugal por un asunto que afectó a su jefe de gabinete.