El líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, y los presidentes autonómicos de su partido escenifican este viernes una "cumbre" en la que pretenden consensuar los principios de su modelo alternativo de financiación autonómicay, sobre todo, construir un frente común y sin fisuras contra la financiación singular de Cataluña. Mientras, la dirigente madrileña Isabel Díaz Ayuso ha querido llevar la voz cantante yendo más allá al pedir al resto de presidentes un plantón a las reuniones bilaterales propuestas por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

Sin embargo, no ha podido convencer ya que muchos presidentes del PP han asegurado que irán a la reunión en la Moncloa propuesta por Sánchez para hablar de financiación. Y pese a instar a sus compañeros a que no acudan a la reunión, la presidenta madrileña no ha explicado si ella participará o no en esa reunión bilateral. Fuentes del entorno de la 'popular' se han limitado a asegurar que "antes tiene que ser la Conferencia de Presidentes".

Por su parte, desde Génova, han insistido, tras escuchar las declaraciones de Ayuso, que ellos no van a incitar a los presidentes a que vayan a la reunión con Sánchez pero tampoco lo van a prohibir. No obstante, no se ha sabido la postura de los distintos presidentes esta mañana a su llegada a la reunión ya que Feijóo ha pedido a todas los barones y baronesas que no hablen con la prensa al respecto. Algo que han obedecido todos, según ha comprobado laSexta.

A la cita en el Palacete de los Duques de Pastrana, han acudido diez presidentes autonómicos del PP -todos menos la balear Marga Prohens, que ha enviado a su número dos por el inicio de curso político en las islas-. Además, han estado presentes el vicepresidente canario, Manuel Domínguez, y el presidente de la ciudad autónoma de Ceuta, Juan Jesús Vivas, que han posado junto a Feijóo frente al palacio.

Financiación, solo en foros multilaterales

De hecho, en la cumbre firmarán un documento donde se han comprometido "a no tratar asuntos de financiación" en otro formato que no sea en "foros multilaterales". Según fuentes del PP a laSexta, la cumbre buscará la escenificación de ese "frente común", de ahí la firma de un documento en el que condenan "la artimaña de la bilateralidad con los separatistas". Se han comprometido "a no tratar asuntos de financiación en ningún formato que no sea un Consejo de Política Fiscal y Financiera", es decir, con todos, e insisten: "Multilateralidad".

Además, los del PP han denunciado que no se puede hablar de criterios de financiación "si saltan por los aires los principios" de "solidaridad e igualdad". Y han criticado el intento de "división" que, a su juicio, pretende el Gobierno de Pedro Sánchez. El encuentro se celebra a puerta cerrada en el Palacete de los Duques de Pastrana, en Madrid, y a su término comparecerán ante los medios tanto el líder de la oposición como los dirigentes regionales.

A esta conjura contra lo que se denomina "cupo separatista", los 'populares' llegan ya con una postura unitaria, firmada en este manifiesto, que, entre otras cosas, señala que creen "en la particularidad de cada comunidad autónoma, pero no en la desigualdad y la insolidaridad".

El texto rechaza además "un modelo confederal asimétrico, donde algunos negocian bilateralmente con el poder central prebendas y tratos de favor al margen del modelo común". Los presidentes autonómicos firmaron este manifiesto conjunto el pasado 26 de agosto, antes de que el jefe del Ejecutivo anunciase su intención de poner en marcha un nuevo sistema de financiación con más recursos para todas las autonomías y de recibir en la Moncloa, individualmente, a los dirigentes regionales.

Ayuso va más allá pero no convence

A esa invitación de Sánchez, han respondido el PP y sus presidentes autonómicos con la exigencia de que el sistema de financiación se negocie en un "foro multilateral", como la Conferencia de Presidentes o el Consejo de Política Fiscal y Financiera. La presidenta de la Comunidad de Madrid ha ido más allá y ha pedido a sus compañeros que no se sienten con Sánchez, aunque autonomías como Galicia, Región de Murcia, Comunidad Valenciana, Castilla y León o Cantabria son favorables a acudir a la cita, aunque no busquen negociar bilateralmente.

La dirección nacional del PP, por su parte, ha dado vía libre a sus barones, destacando su plena confianza en todos ellos, como han trasladado fuentes de Génova. La importancia de reunirse o no con Sánchez la subrayan desde la Generalitat valenciana, donde fuentes de la presidencia se preguntan cómo no va a ir su presidente regional, Carlos Mazón, "si le llama el que les debe 3.000 millones de la dependencia, 25 recortes al Tajo-Segura, el agua del lago de l'Albufera o las ayudas a la cerámica".

La financiación autonómica es un elemento que tradicionalmente divide a los distintos territorios, que en función de sus características quieren que primeros criterios de población, envejecimiento o dispersión para repartir los recursos. La complejidad de encajar este rompecabezas la reconocen tanto en la dirección nacional del PP como en las regiones, donde también recuerdan que esta división no es ideológica, ni de partido, sino de región.

Por eso, más allá del rechazo unánime que despierta la financiación singular para Cataluña, que el PP considera una mutación institucional, el interrogante de la cumbre de Feijóo con sus barones es el alcance del acuerdo que se alcanzará. En los últimos meses, Génova ha trabajado en un consenso sobre los principios que rigen el sistema, aunque este partido es reacio a plantear un modelo de financiación concreto, con cifras y por consiguiente, cesiones por parte de los territorios.

Consideran que es al Gobierno a quien le competirá hacerlo, según apuntan fuentes de la dirección. En todo caso, los expertos en financiación del PP defienden que es posible pactar un sistema que garantice la prestación de los servicios públicos en todas las regiones y plantean un fondo transitorio mientras fructifica la negociación.