"Servicio, compromiso y deber". Es el lema elegido personalmente por Felipe VI para conmemorar el décimo aniversario de su reinado, acompañado de un emblema que integra su escudo de armas. Las tres palabras escogidas por el jefe del Estado, encabezadas por el rótulo 'X Aniversario', pretenden sintetizar su línea de actuación desde que relevó a Juan Carlos I en el trono hace ahora 10 años.
Es la primera ocasión en la que don Felipe recurre a una leyenda para ilustrar un aniversario de su trayectoria al frente de la Corona. Por ser la primera década de reinado, la conmemoración se va a desarrollar durante un año, en el que se pretenden organizar actos y visitas a ciudades y municipios pequeños con el fin de "acercar a los reyes al pueblo".
A lo largo de este miércoles, fecha en que se cumplen los 10 años de la proclamación, los reyes, la princesa Leonor y la infanta Sofía han participado en varios actos en el Palacio Real de Madrid y sus aledaños.
La infanta Sofía, que ya ha terminado el colegio, llegó el pasado viernes a España, mientras que Leonor volverá a Zaragoza hasta el 3 de julio, que será cuando se gradúe y recoja su despacho. Ambas han protagonizado el momento más emotivo de la jornada, cuando han dedicado un brindis por sorpresa a sus padres al inicio del almuerzo en el Palacio Real, frente a un monarca visiblemente emocionado.
Entrega de medallas a ciudadanos ejemplares
Felipe VI ha entregado la Orden del Mérito Civil a 19 ciudadanos no conocidos de toda España considerados ejemplos para la sociedad coincidiendo con el aniversario de su reinado. Ha sido el acto central de una jornada que comenzaba con el relevo solemne de la Guardia Real en el Patio de la Armería, que don Felipe, doña Letizia y sus hijas han presenciado desde el balcón central del Salón del Trono que da a esa plaza. Es la primera vez que se asoman al balcón de la Plaza de la Armería, ya que anteriormente, tanto en la boda de los reyes como en la proclamación, lo hicieron desde el balcón de la Plaza de Oriente.
Tras la parada militar ha tenido lugar la imposición de las condecoraciones en el Salón de Columnas, como ya se hizo en 2015 y 2019, en el primer y quinto aniversario de la proclamación, y en 2021, en el homenaje a las personas que trabajaron en la primera línea frente a la pandemia.
La pretensión es el reconocimiento de la Corona a quienes desarrollan "su vida y labor profesional ordinaria de manera ejemplar y al servicio de la sociedad", según avanzaban fuentes de la Casa del Rey. La selección de los condecorados se ha hecho con criterios de representación y equilibrio territorial y sectorial y a través de la aportación de distintas administraciones, entidades y colectivos de ámbitos variados. Así, se han entregado un total de 19 medallas, una por comunidad autónoma y Ceuta y Melilla.
Discurso de Felipe VI y almuerzo
Tras la entrega de las insignias, Felipe VI ha pronunciado un discurso, en el que el monarca ha aludido implícitamente a su padre, el rey emérito, al hablar de "coste personal" y de asumir con "coherencia" e integridad sus funciones. "Siempre he creído en la importancia de ser coherente con los compromisos asumidos. Esta actitud es la base de la integridad e implica ser fieles a nuestros principios y valores en todas nuestras decisiones y actos; implica esforzarse en escuchar, en discernir lo que es correcto de lo que no lo es, y en actuar de forma responsable con ese discernimiento, asumiendo incluso el coste personal que ello pueda conllevar", ha defendido.
En estos actos, precisamente, no ha participado el rey Juan Carlos, que se marchó de España el pasado domingo tras una nueva visita a Sanxenxo (Pontevedra), ni la reina Sofía. Como ocurrió en la jura de la Constitución de la princesa Leonor el pasado 31 de octubre, el Palacio de la Zarzuela considera que el protagonismo recae en Felipe VI al celebrarse su primera década en el trono y que por ello no se justifica la presencia de los reyes eméritos.
Posteriormente, los premiados, junto a sus acompañantes, se han unido al almuerzo ofrecido por los reyes y sus hijas en el Comedor de Gala del palacio, con la presencia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, los poderes del Estado y aquellos que han ostentado la presidencia de órganos constitucionales desde 2014. En torno a un centenar de invitados se han sentado en una única mesa, intercalados los cargos institucionales con los condecorados, con el propósito de "fundir la monarquía, los poderes del Estado y la sociedad civil", según Zarzuela.