La Fiscalía Anticorrupción ha pedido al juez de la Audiencia Nacional Manuel García-Castellón el archivo de la pieza Carol perteneciente al caso Villarejo en la que se investiga si Corinna Larsen contrató al excomisario Villarejo para espiar a una de sus asistentes.
Según ha podido saber laSexta, Anticorrupción cree, igual que la defensa de Larsen, que no hay indicios de los delitos de cohecho ni revelación de secretos.
En esa pieza se investigan las conversaciones grabadas entre Corinna Larsen y el excomisario Villarejo. En una de ellas, la empresaria alemana habla de las cuentas del rey emérito y le atribuye el cobro de comisiones por el AVE a la Meca.
García-Castellón investiga sobre una conversación en la que Corinna le exponía a Villarejo su preocupación sobre una exasistente española que podría estar vendiendo datos de su vida privada. En esas mismas grabaciones Corinna también habló sobre las presuntas cuentas opacas del rey emérito en Suiza.
Villarejo le vendió sus servicios explicando que tenía los mejores especialistas del mundo para esta tarea. En ese sentido, el juez considera que debe esclarecerse si el encargo llegó a materializarse y si se abonó dinero para ello, lo que podría constituir delitos de cohecho activo y pasivo en los que podrían haber intervenido los investigados por los delitos cometidos en España.
Hay que recordar que el juez ya desoyó el recurso que presentó Corinna Larsen y al que se adhirió la propia Fiscalía. En ese escrito la investigada se basó fundamentalmente en que el excomisario Villarejo estaba ya jubilado cuando le hizo el supuesto encargo.
En el auto que rechazó la desimputación de Larsen, el juez señaló que la Fiscalía "se adhiere a los recurrentes" en al menos tres puntos y enumeró: "La edad de jubilación de Villarejo, la falta de conexidad entre los hechos que dieron lugar a la pieza Carol y los que motivaron la reapertura".
La Fiscalía también coincidió con la defensa de Larsen en alegar la falta del requisito de procedibilidad para perseguir tanto el delito de cohecho (al necesitar querella del Ministerio Fiscal) como el delito de descubrimiento o revelación de secretos (pues no hay denuncia del agraviado o perjudicado ni querella del Ministerio Fiscal).