La OTAN ha anunciado que pondrá fin a su misión en Afganistán iniciando a partir de mayo una retirada "ordenada" y en coordinación con Estados Unidos en la que espera replegar todas sus fuerzas "en unos meses". La confirmación ha llegado tras una reunión por videoconferencia de los ministros de Exteriores y Defensa de la OTAN, en la que el secretario de Estado, Antony Blinken, y el secretario de Defensa, Lloyd Austin, han participado desde Bruselas con el secretario general, Jens Stoltenberg, en una escenificación de la cooperación entre Washington y el resto de aliados.
"A la luz de la decisión de Estados Unidos de salir de Afganistán, hemos decidido la retirada de la misión a partir de mayo y será ordenada, coordinada y segura. La idea es completar la retirada en unos meses", ha señalado Stoltenberg, en una rueda de prensa junto a Blinken y Austin, tras el histórico anuncio del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, desde la Casa Blanca.
El político noruego ha subrayado que cualquier ataque talibán durante el repliegue será respondido por parte de las fuerzas aliadas, al tiempo que ha incidido en que la OTAN abre un "nuevo capítulo" en las relaciones con Afganistán. "Seguiremos dando apoyo a Afganistán pero de otra manera, sin miles de soldados en el terreno, con respaldo al proceso de paz y trabajando para garantizar que no perdemos lo ganado este tiempo", ha argumentado.
Los aliados han aprobado el plan para la retirada, en base a la decisión y sincronizándose con Estados Unidos. Hasta ahora la OTAN había reivindicado la importancia de seguir en Afganistán y habia destacado la importancia de la tarea de adiestramiento de las fuerzas afganas, que cuenta con 9.600 efectivos aliados, de los cuales unos 2.500 son estadounidenses.
Tal y como ha reconocido Stoltenberg, la decisión sobre finalizar la misión "no es fácil" y se había convertido en un "dilema" para la organización militar los últimos meses. "La decisión conlleva riesgos. No desestimo los desafíos que tenemos por delante, pero la alternativa era quedarse y probablemente aumentar los efectivos ante la mayor presión de los talibán", ha admitido el secretario general, que hasta ahora condicionaba la salida a una mejora de la situación en el terreno.
Entre las razones esgrimidas por Blinken y Austin está la de adaptar la OTAN a los desafíos de 2021, momento en el que han mencionado a China, Rusia e Irán como actores que suponen una amenaza a la seguridad internacional. Durante la rueda de prensa, Blinken ha apuntado que mantener la presencia de forma "indefinida" no estaba en el interés de Estados Unidos ni de ninguno los aliados. Mientras que Austin ha hecho un llamamiento a los líderes aliados para llevar a cabo esta nueva fase "con profesionalismo" y de forma "ordenada" y "segura".
González Laya defiende la salida de Afganistán
La ministra de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, Arancha González Laya, ha defendido que la salida de las Fuerzas Armadas españolas de Afganistán sea de forma conjunta con Estados Unidos y el resto de miembros de la OTAN y ha asegurado que seguirán comprometidos en mantener los logros que se han alcanzado durante estos veinte años.
Así lo ha sostenido la ministra una entrevista en RNE después de que este miércoles se haya anunciado el fin de la misión 'Resolute Support' coincidiendo con el 20 aniversario de los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Nueva York. "Esta ha sido la filosofía de la misión da la OTAN. Lo queremos hacer juntos siguiendo esta fecha señalada por Estados Unidos del 1 de septiembre en la que esperemos que todos los hombre y mujeres del Ejército de España vuelvan a nuestro país", ha asegurado González Laya.
Preguntada sobre si después del repliegue se hará un seguimiento del trabajo, la titular de Exteriores ha señalado que seguirá la Embajada de España en el país afgano y que se "mantendrá" el compromiso con el mantenimiento de los logros. "Se mantendrá nuestro compromiso de apoyo a la paz, estabilidad y, sobre todo, progresión económica y social en este país que tanto ha sufrido", ha deslizado. En concreto, ha trasladado una especial preocupación sobre los derechos de las mujeres y las niñas, "que tanto ha costado defender", ha asegurado.
Al hilo, la ministra ha afirmado que para las mujeres afganas "ha merecido la pena" la misión. "Disfrutan de unos derechos, no los que nos gustarían que ellas tuvieran, pero infinitamente mejores de los que tenían hace 20 años", ha enfatizado y, en sus palabras, ha asegurado que aunque ha habido progresos, estos son "insuficientes y frágiles". En este sentido, ha puesto de relieve la necesidad de cumplir con los acuerdos de paz con los talibanes. "Nosotros nos mantendremos vigilantes porque no vamos a aceptar regresión en estos veinte años de pequeño progreso y de pequeños logros", ha aseverado.