Alivio y optimismo -y algún corazón recuperando todavía el ritmo cardiaco- en el Gobierno horas después de la celebración de un superpleno de 12 horas de duración que por momentos llegó a parecerse a una película. Un 'thriller' en el que prácticamente nadie podría haber aventurado el resultado, que finalmente fue positivo para la coalición; más bien, para el ala socialista del Ejecutivo, pues Sumar se marchó del Senado con un serio revés: la vicepresidenta y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, no logró aprobar el decreto de empleo que había presentado ella a razón del rechazo expreso de Podemos.
En el PSOE, pese a la victoria, no se fueron con mejor sensación. Según han trasladado fuentes a laSexta, el acuerdo con Junts per Catalunya llegó en el último momento, tras muchas llamadas de teléfono, mensajes y hasta carreras por los pasillos de un Senado que vivió una jornada frenética y una votación de infarto. Escasos minutos antes de la votación, desde el Gobierno ni siquiera tenían claro cómo la formación independentista iba a materializar el acuerdo alcanzado en el tiempo extra.
Para ellos, la jornada fue agónica y un auténtico potro de tortura. Por ello, se hace autocrítica entre filas socialistas. Creen que el Gobierno tiene que aprender a negociar de otra manera; esto es, hasta la última coma de cualquier decreto. Por su parte, el Ejecutivo ha afirmado que a partir de ahora impulsará más proyectos de ley y menos decretos. Asimismo, los miembros del partido han lamentado el desgaste sufrido con esta votación pero han señalado al mismo tiempo, como aseguró Sánchez anoche, que bien está lo que bien acaba, y que lo importante es el resultado.
Lo que ocurrió es que finalmente Junts optó por no votar a ninguno de los tres decretos en la primera votación, dejando aprobado el decreto 'ómnibus', y se abstuvo en la repetición, allanando el camino a las medidas anticrisis. Sea cual fuere la forma de escenificar que había acuerdo pero con muchos peros, lo cierto es que en el Gobierno han optado por quedarse con el resultado de las votaciones, obviando todo lo demás. Así se ha desprendido de los mensajes publicados en redes sociales por los distintos líderes políticos.
"Hoy es un gran día para la mayoría social de nuestro país. Hemos aprobado la revalorización de las pensiones conforme al IPC, la bonificación del transporte público, la rebaja del IVA de alimentos básicos o los descuentos en las facturas de la luz y el gas. Lo hacemos con diálogo y capacidad de acuerdo. Política útil para la ciudadanía", celebraba en su cuenta de 'X' -antes conocido como Twitter- el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, dejando claro en este mensaje que lo importante, el objetivo tras todo lo vivido este miércoles, era sacar adelante ese paquete de medidas.
Gana la política útil, pierde la política de tierra quemada de PP y Vox. Y España sigue avanzando"
De la misma forma lo ha celebrado el ministro de Presidencia, Justicia y Relación con las Cortes, Félix Bolaños. Uno de los grandes protagonistas de las últimas horas; el hombre pegado a un teléfono móvil que no cejó en su empeño de convencer a los independentistas de que la posibilidad de acuerdo no se había esfumado completamente. Y así lo dejó ver en una publicación también expuesta en 'X': "Hoy el Congreso ha convalidado dos RDL con los que seguimos protegiendo a la ciudadanía, subiendo pensiones, bajando la factura de la luz y reforzando el Estado del bienestar".
"Gana la política útil, pierde la política de tierra quemada de PP y Vox. Y España sigue avanzando", concluía Bolaños, aprovechando su valoración para lanzar un dardo al bloque de la derecha, quien creyó ver durante unas horas la posibilidad de derrumbe del Gobierno de la coalición. Un dardo que también ha lanzado la vicepresidenta y ministra de Hacienda, María Jesús Montero: "Ayer fue un día importante, ganó España y perdió el PP, que vive mal estas derrotas porque solo pone piedras en el camino, no quiere que se mejore la vida de la gente porque solo mira intereses partidistas".
Con más prudencia se han expresado en Junts, que han querido desvincularse de la idea de acercamiento al Gobierno. "No hemos salvado a Pedro Sánchez. En el primer round de esta legislatura ya se intentaban colar cosas que desvirtúan el acuerdo. Si el mensaje no lo habían entendido, lo harán por la fuerza", ha expresado Laura Borràs, líder de la formación, que ha dejado claro que "la legislatura avanzará según acuerdos que sean buenos por Cataluña" y que "las desconfianzas" siguen siendo "absolutas" con la coalición: "Tenemos que hacer una gran fiscalización de las acciones políticas ante los incumplimientos del Gobierno del Estado".
Encontronazo entre Sumar y Podemos
Por el contrario, sin celebración se quedó Yolanda Díaz, muy crítica con la posición de un Podemos que acabó por ser el único partido en frustrar su decreto. Junto al de la formación morada, el voto en contra del Partido Popular, de Vox y de Unión del Pueblo Navarro ha llevado a que este paquete de medidas en materia laboral haya sido derogado y, con él, iniciativas como la extensión del permiso de lactancia o el subsidio por desempleo, este último muy criticado por el partido dirigido por Ione Belarra.
"Esto es lo que han votado hoy y tienen que rendir cuentas. La política es demasiado seria, siempre digo que hay que respetar las instituciones porque es demasiado importante. La gente que menos tiene más necesita de la cosa pública. El golpe se lo dan a 730.000 personas que iban a recibir 90 euros más al mes, y hoy el bloque de la extrema derecha, la derecha y Podemos han dicho que no. El resto de explicaciones la tendrán que dar ellos", criticó duramente la titular de Trabajo en una entrevista concedida a 'Onda Cero' tras ver fracasados sus esfuerzos por sacar adelante su decreto ley.
En la misma línea se expresó la ministra Montero, asegurando que "la votación de Podemos no se entiende", y precisando: "La izquierda quiere que se aumente la cobertura a los desempleados, y eso era lo que hacía esta reforma. Con tristeza asistimos a que este grupo, votando con PP y Vox, no exprese sus valores". Aun así, reseñó que "lo importante es retomar esta cuestión ahora para ver cómo la impulsamos", pues no dan "esta batalla por perdida": "Veremos cómo hacerlo".
Unas horas más tarde, Belarra devolvía la pelota a Díaz en unas declaraciones concedidas al programa El Intermedio: "Creo que no se trata de culpables. Se trata de propuestas políticas. Ha sido difícil para el Gobierno que Podemos no iba a aceptar recortes en las pensiones de las personas que cobran subsidios por desempleo para mayores de 52 años. Pueden traerlo mañana sin el recorte y por supuesto contarán con los votos de Podemos. Y pueden hacerlo, para eso son el Gobierno de España".