El Gobierno ha aprobado una partida de 38,9 millones para el impulso de la Salud Mental y el reparto de 579,1 millones de euros entre las comunidades autónomas para la mejora de las infraestructuras y la ampliación y renovación del equipamiento clínico de los centros de salud de Atención Primaria.
El primero de los planes, el de mejora de las Infraestructuras en Salud Mental Comunitaria, financiará equipos comunitarios de salud mental tanto para población adulta como para población infanto-juvenil, como mobiliario general, material de exploraciones psicométricas, climatización y ascensores, entre otros. También para labores de prevención y detección precoz, entre las que se incluye la línea telefónica de atención a la conducta suicida.
Así, el objetivo es mejorar el acceso a los servicios con la mejora de las unidades existentes y también creando unidades de salud mental nuevas, a fin de "conseguir un sistema integral de atención de la salud mental", ha explicado el ministro de Sanidad, José Miñones.
Respecto a la partida para la Atención Primaria, las comunidades autónomas deberán dedicar los fondos a modernizar y mejorar los más de 13.000 centros de AP y a financiar nuevas salas de fisioterapia, radiodiagnóstico y urgencias para evitar esperas, saturación o desplazamientos innecesarios, según detallan fuentes socialistas.
"Es la mayor inversión que se ha realizado en AP a lo largo de la historia y me gustaría destacar que no son fondos de recuperación, sino que son fondos del presupuesto nacional", ha recalcado el responsable de Sanidad.
Tanto la partida de AP como la de salud mental, ambas finalistas, ya fueron anunciadas por el propio ministro el pasado 17 de abril tras presidir su primera reunión del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS); si bien el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció este pasado fin de semana en diferentes actos de campaña que este martes se aprobarían en el Consejo de Ministros.