La polémica por el protocolo antiaborto que Vox aseguró que implementaría en Castilla y León sigue. El Gobierno ha emitido ahora un comunicado en el que asumen que "el ejecutivo autonómico ha acatado formalmente el requerimiento", puesto que, dice el texto, la Junta se ha "abstenido" de adoptar y aplicar los protocolosque "incumplen la normativa estatal y menoscaban los derechos de las mujeres". Con todo, según fuentes del Gobierno a laSexta, seguirán vigilantes porque "temen" que el PP pueda estar buscando una fórmula para dar "respuesta a las exigencias de sus socios de Vox".
Esta misiva llega como respuesta a la rueda de prensa —y posterior comunicado emitido al Gobierno— en la que el Consejero de Presidencia de la Junta de Castilla y León explicaba que inadmitían el requerimiento que el Gobierno aprobó para que la Consejería de Sanidad se abstenga de aprobar cualquier medida que vulnere la actual normativa de la Interrupción Voluntaria del Embarazo. Explicaban que lo inadmitían porque "no existe acuerdo que vulnere legislación alguna".
Todo esto parte de un anuncio hecho porel vicepresidente regional Juan García-Gallardo, y al que el presidente regional, Alfonso Fernández Mañueco, no respondió hasta unos días después, en el que explicaba queofrecerían a las mujeres embarazadas"que lo requieran" una ecografía en el primer trimestre del embarazo para "escuchar el latido del bebé" y una ecografía 4D antes de interrumpirlo.
El Gobierno reaccionó emitiendo un requerimiento para paralizar cualquier protocolo que la Junta quisiera poner en marcha en este sentido. Entonces, Mañueco envió una carta al Ejecutivo central "reiterando" que no se modificaría el protocolo de interrupción del embarazo y que no se obligaría a nada ni a médicos ni a mujeres embarazadas.
Pero desde Vox han seguido insistiendo en que dicho protocolo sí que fue aprobado en el seno del Gobierno autonómico e incluso amenazaron con romper con el PP si no lo ponían en marcha en cuestión de horas. Después rebajaban esta advertencia y lo dejaban en que revisarían los acuerdos de Gobierno con el PP si finalmente este supuesto protocolo quedaba en agua de borrajas.
Con toda esta polémica, el Gobierno pide al PP que aclare la situación. La ministra portavoz, Isabel Rodríguez, se ha pronunciado así al respecto: "Algo aprobaron, entonces lo llamaron protocolo, ahora lo llaman instrucción, y no quieren dar cuenta de lo que es".
Además, a través del Ministerio de Presidencia se remitirá una carta al Consejero de Presidencia de la Junta para recordar nuevamente que "resulta contrario a la legalidad vigente" que una comunidad autónoma adopte cualquier medida encaminada a obligar, indicar, ofrecer, recomendar o sugerir a la mujer embarazada que ha decidido libremente interrumpir su embarazo "la utilización de cualquier tipo de prueba ecográfica fuera de las indicaciones avaladas por la evidencia científica".
Mañueco carga contra Sánchez
La respuesta del presidente de la Junta de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, no ha tardado en llegar. A preguntas de los periodistas en su visita a Fitur, Mañueco ha acusado a Sánchez de no tener "escrúpulos" y de haber mentido para "utilizar electoralmente a las mujeres".
"El comunicado del Gobierno es la constatación de la mentira, el engaño, la manipulación y la sobreactuación de Sánchez. Es capaz de atacar a una comunidad autónoma que está en la vanguardia de la lucha por los derechos de las mujeres", ha denunciado el presidente regional.