En la rueda de prensa del Consejo de Ministros celebrado este viernes, la portavoz del Ejecutivo, la ministra María Isabel Celaá, ha respondido a dos preguntas sobre la política penitenciaria en lo referente a los políticos independentistas en prisión y a los de ETA, una vez anunciada la disolución de la banda terrorista.
"Esto no ha sido tratado, no ha sido objeto de este Consejo de Ministros", ha contestado Celaá, que ha añadido: "Obviamente, cuando las circunstancias cambian, se requieren de otras políticas, y de esto hablaremos en otras conferencias de prensa con toda seguridad".
Celaá ha sido cuestionada por las diferencias de criterio entre el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, y el juez del Supremo Pablo Llarena. El primero sostuvo este jueves que el traslado de presos preventivos como los líderes del 'procés' es competencia del magistrado y éste contestó en un auto que es de Instituciones Penitenciarias.
"Es una cuestión como siempre de matices", ha defendido la ministra portavoz. "El Gobierno, y supongo que también el juez Llarena, son conscientes de que los presos provisionales están a disposición del juez instructor. Una vez que han finalizado ya las diligencias, pueden ya ser transportados y ya están bajo la competencia de Instituciones Penitenciarias".
La portavoz del Gobierno de Pedro Sánchez ha añadido que, "para mayor seguridad" de los presos y para "facilidad" del juez, el criterio general es que estén cerca del órgano judicial. "Es una cuestión de comunicación entre el Gobierno y el Poder Judicial. Se evaluará y se actuará para el bien de todos", ha añadido Celaá.
Fuentes del Ministerio del Interior han confirmado antes del Consejo de Ministros que "no hay una decisión tomada" sobre el posible cambio de cárcel de los líderes independentistas.
Desde Moncloa se ha subrayado al término del Consejo de Ministros que, cuando acaben las diligencias judiciales, algo previsto para los próximos días, "estaremos en otra pantalla diferente". Será entonces cuando se evalúe el "nuevo escenario" y cuando el Gobierno responderá si acepta que se traslade a Catalunya a Oriol Junqueras y a los otros ocho líderes independentistas.
Fuentes de Moncloa insisten en que será una decisión completamente desligada con la evolución de las relaciones entre el Gobierno de Pedro Sánchez y el de Quim Torra, ya que "no hay facturas que pagar" por el apoyo a la investidura del presidente del Ejecutivo.