Tras los seis asesinatos machistas de este pasado fin de semana, la ministra de Igualdad, Ana Redondo, y el de Interior, Fernando Grande-Marlaska, han reconocido este martes que el sistema VioGén de protección a las víctimas de violencia de género "no es infalible pero salva vidas", y han insistido en que "funciona y protege a 40.000 mujeres".
Así se han pronunciado en una comparecencia ante los medios tras celebrarse el Comité de Crisis, el octavo desde que se creó esta herramienta de trabajo para analizar los casos de violencia machista.
Marlaska ha defendido que este sistema de protección para las víctimas "es pionero, único en el mundo, y realiza una protección integral", aunque ambos ministros han reconocido que sentían "frustración, pero no desánimo" por los asesinatos de violencia de género y de violencia vicaria que se han producido el pasado fin de semana en las provincias de Cuenca, Málaga y Granada. Ante ello han abogado por "seguir mejorando la coordinación".
También han manifestado que a pesar de la bondad del sistema hay que "mejorarlo para acabar con el terrorismo machista", "tiene que ser más efectivo", ha proclamado Redondo, porque en lo que va de año esa violencia ha acabado con la vida de 19 mujeres y de nueve menores víctimas de la violencia vicaria. Ya son 1.263 las mujeres asesinadas desde el año 2003 y 62 los menores desde 2013.
Redondo, por su parte, ha anunciado que mañana se reunirá con la ministra de Sanidad, Mónica García, para que "la red de Sanidad detecte con antelación" los casos de maltrato que sufren mujeres y lo ponga en conocimiento del sistema y así "poder actuar y prevenir", y también ha dicho que hoy se había reunido con el titular de Derechos Sociales, Pablo Bustinduy, para que los servicios sociales también intensifiquen y detecten "con agilidad los casos de mujeres que pueden estar sufriendo violencia de género".
Ambos han vuelto a pedir la colaboración ciudadana del entorno de las víctimas "para que denuncien" porque la denuncia es "el paraguas que protege a las víctimas".
Violencia vicaria
Sobre los menores asesinados por sus padres, la titular de Igualdad ha abogado por "mejorar las medidas de protección" y ha reiterado que "un maltratador nunca es un buen padre". En este sentido ha dicho que las medidas de protección tienen que ser penales y no civiles, porque las civiles duran solo 30 días y no protegen a los menores. También ha insistido en la necesidad de "escuchar a los menores, que cuenten cómo viven las situaciones de violencia y atender sus necesidades".