Pitidos y gritos contra la corporación municipal de UPN durante la procesión de San Fermín por el centro de Pamplona. Varias personas han pitado, gritado "¡fuera UPN1" y proferido insultos como "fascistas" a los miembros del gobierno municipal a la altura de la calle Curia.
La Policía Municipal ha tenido que intervenir y hacer un cordón en varios tramos para evitar los empujones y separar a los participantes en el desfile de los radicales que les increpaban.
Posteriormente, en declaraciones a los medios de comunicación, el alcalde de Pamplona, Enrique Maya, ha criticado que "los intransigentes de siempre son los que intentan, a base de intimidar, acosas, insultar y si pueden pegar, cambiar las reglas del juego que han decidido los ciudadanos".
A pesar de los incidentes, Maya ha destacado que no ha pasado miedo en ningún momento porque estaban "perfectamente protegidos por una excelente Policía Municipal". "Nos hemos sentido, dentro de la gravedad de la situación, que no es nada agradable, perfectamente protegidos", ha remarcado.
Estos incidentes se producen después de que, durante el chupinazo, se produjera un forcejeo en el interior del Ayuntamiento de Pamplona entre concejales de EH Bildu y Geroa Bai con la Policía Municipal, al intentar estos ediles desplegar una ikurriña en la fachada.
Preguntado sobre si le preocupa que estos sucesos se repitan a lo largo de los Sanfermines, el alcalde de Pamplona ha contestado que "serán Asiron y Bildu los que tendrán que cambiar el chip". "Nosotros actuamos con toda normalidad, defendemos la fiesta, defendemos que se cumpla la Ley de Símbolos, y que nuestras tradiciones perduren", ha subrayado. "Siempre estaremos ahí, los que tienen que cambiar son ellos", ha concluido.