En pleno centro de Alcalá de Henares se ha hallado un refugio antiaéreo que hace casi un siglo protegía a los ciudadanos frentre a los bombardeos sobre la ciudad. El búnker tiene capacidad para unas 1.000 personas y ha sido localizado gracias a una foto aérea de la aviación alemana que colaboró con Franco.
El arqueólogo Luis Antonio Ruiz explica a laSexta que esa fotografía permitió hacerles ver que la entrada coincidía con una esquina del parque de la Plaza de Cervantes.
El refugio fue construido en 1938 y ahora se pueden ver latas de comida, zapatos, bombillas e incluso grafitis, vestigios de quienes sufrieron el terror de los bombardeos franquistas. Tan solo dos meses después de su apertura, 14 personas murieron en su interior en un bombardeo.
Sin embargo, la estructura resistió el final de la guerra y a varias obras de remodelación la plaza. ¿Su secreto? Cuenta con muros con más de seis siglos de historia, ya que se hizo con sillares de la iglesia de Santa María, donde se bautizó Miguel de Cervantes, que fue incendiada el 26 de julio de 1936 por tropas milicianas.