El Servicio de Atención de y Coordinación de Urgencias y Emergencias 112 de Castilla-La Mancha ha confirmado el hallazgo de restos humanos en la zona de Las Ramblas de Letur, donde se buscan a cuatro personas tras la riada que devastó parte del municipio albaceteño el pasado martes.Así lo han confirmado a Europa Press y EFE dichas fuentes, que indican que el hallazgo se produjo en este pasado lunes sobre las 21.00 horas.
Minutos después el delegado del Gobierno de Castilla-La Mancha en Albacete, Pedro Antonio Ruiz Santos, ha confirmado esta información, detallando que se trata de una extremidad de uno de los cuatro desaparecidos que se buscan en la localidad. Indica que estos restos ya se han trasladado al Instituto de Medicina Legal de Albacete, donde se recogerán muestras para enviar al Instituto Anatómico Forense de Madrid, donde se determinará la identidad cotejando con las muestras de ADN de las cuatro familias que siguen pendientes de encontrar a sus seres queridos.
Los restos han aparecido a 500 metros del final del pueblo, mientras que los cuerpos de Dolores y Antonia, las dos vecinas que ya han recibido sepultura, se encontraron a kilómetro y medio y doce kilómetros, respectivamente. "Uno de esos avisos de la unidad canina, cuando era de noche, determinó que había restos humanos, por lo que, de forma manual, porque la máquina no podía acceder, se determinó que efectivamente eran restos de una extremidad", ha relatado Ruiz Santos, quien ha manifestado que espera que a lo largo del día se tenga la confirmación de la identidad.
Mientras tanto, los equipos de rescate vuelven a peinar la zona donde ha aparecido ese resto humano, sepultado bajo el lodo, recorriendo de nuevo toda la rambla, así como el pantano y el río Segura. En Castilla-La Mancha, las lluvias torrenciales de la semana pasada han dejado tres víctimas mortales, dos de ellas en Letur (Albacete) y otra en Mira (Cuenca), mientras que en Letur aún se busca a cuatro personas: un matrimonio que estaba en su casa cuando ésta fue arrollada por el agua y dos trabajadores municipales que estaban en un vehículo en la zona del arroyo en el momento de la riada.