Los trabajos que realizan arqueólogos de la Universidad de Jaén (UJA) en la fosa 548 del viejo cementerio de San Eufrasio de la capital jienense han sacado a la luz los primeros restos humanos, desde cráneos y piezas óseas y hasta cadáveres sin desintegrar, de al menos una docena de personas represaliadas del franquismo.
Esta fosa es una de las tres del camposanto de Jaén donde los investigadores creen que están los restos de 1.286 represaliados del régimen, cuyos familiares llevan más de 80 años esperando la exhumación de los cuerpos.
El arqueólogo Marcos Soto Civantos, que participa en los trabajos de delimitación previos a la exhumación, ha explicado a la agencia Efe que se ha podido datar la existencia de esta fosa desde 1939 a principios de 1940. También destaca la cantidad ingente de escombros que han tenido que sortear hasta localizar los primeros restos humanos.
Cuando se complete la exhumación en la fosa 548 llegará el turno a las otras dos fosas del camposanto. En la número 48, la más pequeña, está documentada la presencia de 32 restos, pero la que aguardan más jienenses es la célebre fosa 702, donde se cree que hay 1.081 cuerpos esperando su exhumación.