El número de horas extraordinarias no pagadas realizadas por los asalariados en la semana registró un descenso del 32,1% en el tercer trimestre de 2020 respecto al segundo, la mayor caída intertrimestral de la serie histórica que comienza en 2008.
Así se desprende de datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) del Instituto Nacional de Estadística (INE). El descenso es el mayor en una variación intertrimestral y deja la cifra total de horas extras no pagadas en el tercer trimestre en 2,32 millones de horas.
Esta cantidad supone casi 1,1 millones de horas menos frente al registro del segundo trimestre. Además, la cifra global es la tercera más baja de la serie histórica, puesto que en el tercer trimestre de 2010 se registró el mínimo récord de 2,21 millones de horas extras no pagadas y en el tercer trimestre del año pasado se anotó el segundo mínimo, con 2,22 millones.
Las horas extras no pagadas han bajado en el tercer trimestre de cada año respecto al segundo desde que comienza la serie en 2008. Los 2,32 millones de horas no remuneradas suponen que las compañías se 'ahorran' 58.083 empleos a tiempo completo (40 horas) que se cubren con horas adicionales sin pagar.
Este tipo de horas pasaron a ser en el tercer trimestre menos habituales que las horas extras pagadas, que totalizaron en ese periodo 3,06 millones. En variación interanual, las horas adicionales no pagadas subieron un 4,6%, ya que en el tercer trimestre de 2019 se contabilizaron 2,22 millones.
Por género, los hombres realizaron más horas extras no remuneradas, 1.372.400, que las mujeres, que hicieron 950.900 horas. Esta es la tendencia habitual desde que empieza la serie histórica que considera el INE, en 2008.
El sector en el que las empresas se 'ahorraron' en el tercer trimestre más puestos de trabajo a tiempo completo gracias a estas horas extras fue la industria manufacturera (7.135 empleos), seguida de actividades profesionales, científicas y técnicas (6.795) y educación (6.678).
En suma, las horas extraordinarias realizadas por los asalariados cada semana, tanto pagadas como no pagadas, bajaron a 5.384.700 horas al término de septiembre, un 17,3% menos respecto al periodo entre abril y junio, y prácticamente la misma cifra que hace un año.