Imanol Pradales ha tomado posesión de su cargo como sexto lehendakari de la democracia en el hemiciclo de la Casa de Juntas de Gernika, donde, ha asegurado que, "por voluntad del Parlamento vasco", asume el cargo de lehendakari del Gobierno del País Vasco, así como de la condición de representante ordinario del Estado, "de acuerdo al ordenamiento jurídico".

Previamente había realizado el juramento en el interior del recinto del Árbol de Gernika. "En pie sobre la tierra vasca, humilde ante Dios y la sociedad vasca, bajo el Roble de Gernika, con el recuerdo a nuestros antepasados, ante los que sois representantes del pueblo, juro cumplir fielmente mi mandato (Eusko lur gainean zutunik, Jaungoikoaren eta gizartearen aurrean apalik, Gernikako zuhaitzpean, asaben gomutaz, herri-ordezkari zareten zuen aurrean, nire agintea zintzo beteko dudala zin dagit)", ha sido la fórmula utilizada por Pradales para su jura.

De este modo, Pradales ha pronunciado la jura del cargo manteniendo prácticamente en su integridad la "tradición y esencia" de la fórmula empleada por el lehendakari Agirre en 1936.

El lehendakari ha llegado al Parlamento vizcaíno junto a su esposa, Laura Sáez, donde le esperaba la presidenta de la Cámara vasca, Bakartxo Tejeria y los miembros de la Mesa. Todos ellos han aguardado la llegada del lehendakari saliente, Iñigo Urkullu, para entrar en el hemiciclo, con la música de 'Gernikako Albola' de fondo y bajo los aplausos de los alrededor de 300 invitados.

Pradales, que a su llegada al pleno ha dado la mano a los lehendakaris Carlos Garaikoetxea, Juan José Ibarretxe y Patxi López, ha realizado el juramento en euskera sobre el ejemplar del Estatuto de Autonomía del Parlamento, con el que prometen su cargo los consejeros del Ejecutivo, y una copia del Fuero Viejo de Vizcaya, realizada el 4 de noviembre de 1600 por el escribano Juan Ruiz de Angiz.

Se trata del primer texto que recoge el conjunto de instituciones del Señorío de Vizcaya, las garantías individuales de los vizcaínos y la forma de participación en la vida pública.

De este modo, tras leerse su nombramiento oficial como lehendakari, Pradales ha salido de la Casa de Juntas para jurar bajo el árbol de Gernika, símbolo de las libertades vascas. Le ha acompañado la presidenta de la Cámara, Bakartxo Tejería, al tratarse de una sesión extraordinaria de la Cámara autonómica, así como los miembros de la Mesa. Terminado el juramento, un quintento de la banda de la Ertzaintza ha interpretado el himno de Euskadi "Euzko-Abendaren Eserkia".

Todos los lehendakaris han utilizado el lugar histórico del Árbol de Gernika para su toma de posesión, con las excepciones del lehendakari Leizaola, en 1960, y Carlos Garaikoetxea, en 1984. El primero lo hizo en Donibane Lohizune y el segundo en la sede del Parlamento vasco.

Iñigo Urkullu le entrega el bastón de la Lehendakaritza

Tras un aurresku de honor, Pradales ha vuelto a la Sala de Juntas, donde se ha dado lectura a los artículos 24 y 33 del Estatuto de Gernika.

Desde la tribuna de oradores, Pradales ha pronunciado en euskera y castellano la fórmula de asunción del cargo: "Por voluntad del Parlamento vasco, prestado el juramento, tomo posesión y asumo el cargo de lehendakari del Gobierno del País Vasco, así como de la condición de representante ordinario del Estado, de acuerdo al ordenamiento jurídico".

Después de estas palabras, el lehendakari en funciones, Iñigo Urkullu, le ha hecho entrega del bastón de mando del Gobierno vasco al nuevo lehendakari, Imanol Pradales.

A partir de ese momento, ha empezado a sonar, desde el exterior, el "Agur Jaunak eta Andreak" interpretado por la Banda de Música de la Ertzaintza y se han puesto en pie todos los asistentes.

Pradales se ha dirigido en solitario al exterior hacia el recinto del Árbol Viejo, donde ha realizado solo su homenaje al roble y ha permanecido allí varios minutos en silencio. El acto, en el que también ha sonado la melodía "Agur Zaharra" que sonó en la Jura del Lehendakari Agirre en 1936, ha continuado cuando el lehendakari se ha acercado al nuevo Árbol, para realizarse las fotografías oficiales.