El Juzgado nº 34 de Madrid ha inadmitido a trámite este jueves la querella que interpuso Vox contra Begoña Gómez a raíz de sus actividades en la Universidad Complutense de Madrid. Así lo ha decidido la magistrada Coro Monreal al no observar ni irregularidades ni tráfico de influencias de las que acusaba la formación liderada por Santiago Abascal a la esposa del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.

En concreto, Vox acusaba a Gómez de un delito de tráfico de influencias y otro de intrusismo laboral en torno a la creación de un software para el máster y cátedra que dirigía en la institución académica madrileña. Un tema ajeno a la causa que el juez Juan Carlos Peinado instruye contra la esposa de Sánchez cuyo archivo puede ser inminente ante la inexistencia de indicios concretos contra Gómez. Tampoco se trata del mismo asunto por el que también Vox acusa a Gómez de apropiación indebida.

En este caso, la magistrada concluye en el auto al que ha tenido acceso laSexta que no se aprecia tráfico de influencias en el contrato a Deloitte con el presupuesto de 60.000 euros y 12.600 de IVA. A ojos de Monreal "la presión moral que la querellada tendría que haber ejercido prevaliéndose de su relación marital, lo debería haber sido con el funcionario" que resolvió "aprobar el inicio y ordenar la tramitación del expediente de contratación", o en su defecto, sobre la mesa de contratación. Influencia que no consta.

Tampoco observa la jueza ningún indicio del delito de intrusismo laboral que argumentaba Vox en que Gómez no contaba con la cualificación técnica necesaria para la redacción del pliego. No obstante, no se especifica qué "cualificación técnica sea precisa", recoge Monreal en el escrito.

En esa línea, se subraya que Gómez "inició su relación con la UCM como codirectora de estudios de Formación continua de técnico de Fundraising durante los cursos 2012/1013 у 2013/2014", así como su cargo en la "codirección de un programa Máster de la misma universidad, que estaría celebrando su 11ª edición". De esta manera, para la magistrada "cabe presumirle cierta experiencia profesional desarrollada en la propia UCM, antes incluso de que su esposo fuera presidente del gobierno".