La imagen de Ignacio González saliendo de la prisión de Soto del Real ha sido posible porque el instructor del caso Lezo ha conseguido en tiempo record desentrañar la trama. En eso ha sido clave el viaje del juez García Castellón y el fiscal Carlos Yáñez hasta Barranquilla, en Colombia, donde han localizado dinero y propiedades de Ignacio González.
Unas pesquisas en la que ha sido fundamental el testimonio de uno de los colaboradores de González, ahora arrepentido. "Aporta pruebas, correos, fechas, reuniones y órdenes de González en la trama", ha explicado Teo Lozano, subdirector de Programas de Atresmedia.
Aunque González declaró ante el juez no tener patrimonio fuera de España, el magistrado ha podido constatar que él y sus socios tenían 5,4 millones ocultos en dos cuentas a través de dos sociedades panameñas: 'Rafaello' y 'Amalfi'. Para él, como cabecilla eran 1,8 millones de dólares, y 900.000 dólares para su mano derecha, Edmundo Rodríguez Sobrino, y otros tres colaboradores.
También en Colombia, los investigadores incautaron en junio a la hija de Rodríguez Sobrino un botín de 262.000 euros. Se bebieron el patrimonio del Canal Isabel II, pero, cuando le preguntaron por la compra de la filial Inassa, echaba balones fuera. "Que la operación se hizo por parte de la gente que formaba parte del Gobierno del señor Gallardón es evidente", explicó González al juez en la Audiencia nacional en abril de 2017.
La gestión fraudulenta del Canal fue muy fructífera para ellos. Ya en mayo, el juez bloqueaba en Suiza una cuenta con 18 millones de dólares relacionada con la operación. Saben que faltan seis millones más, aún por localizar. Con todas estas piezas el juez ha consguido constatar los seis delitos por los que se investiga a Ignacio González. Indican penas de prisión superiores a los 30 años.