La primera jornada de huelga convocada para este miércoles en la Inspección de Trabajo ha sido calificada de "éxito" por los sindicatos convocantes que han informado de que los centros de trabajo han permanecido "prácticamente vacíos" y han urgido al Gobierno a cumplir los acuerdos pendientes.
La huelga, convocada por CCOO, CIG, USESS, SITSS y SISLAS, pone de manIfiesto "el hartazgo de la plantilla y la obligada necesidad de que los cambios lleguen al organismo", señala un comunicado conjunto. "El éxito de la convocatoria es palpable (...) y debería obligar al Gobierno a revisar las decisiones que hasta la fecha ha ido imponiendo", añaden.
Los sindicatos denuncian el incumplimiento del acuerdo alcanzado en julio de 2021 y afirman que "no existe ningún obstáculo presupuestario, técnico o legal" que impida su cumplimiento.
Desde los convocantes llevan meses alertando de las carencias de plantilla y el déficit de medios en el organismo y urgen a solventarlas para que un "servicio público esencial" deje de "deteriorarse". Tras este 21 de diciembre, los sindicatos han convocado otras jornadas de huelga para el 25 de enero y el 22 de febrero.
Las críticas de los inspectores de Trabajo
Los inspectores de Trabajo y Seguridad Social denunciaron no haber recibido respuesta por parte de la administración, sea del Ministerio de Trabajo y Economía Social o bien el Ministerio de Hacienda y Función Pública. En una rueda de prensa, los representantes de los distintos sindicatos que convocaron la huelga explicaron que los dos ministerios "no son capaces de traer absolutamente nada que permita identificar esa buena voluntad que hasta ahora todos hemos creído que existía dentro de esta administración".
Desde CCOO, Josetxo Gándara señaló que lo que más preocupa es "esa actitud que ha estado mostrando el Ministerio de Trabajo", que se plasma en los servicios mínimos fijados. Por parte del Sindicato de Inspectores de Trabajo y Seguridad Social, María Flores agregó que irán a la huelga hasta que "por lo menos se nos reconozca y se traduzca la función social y el valor tan enorme que tiene la expresión de trabajo en la sociedad española y que se apruebe una relación de puestos de trabajo competente, digna y necesaria".
Subrayó que carecen de medios materiales y medios personales, ya que "no se refuerza la Inspección de Trabajo", por lo que "no podrá ser lo suficientemente eficaz y eficiente para prestar y dar un servicio público a los ciudadanos".
Flores denunció que llevan 22 años con la misma relación de puestos de trabajo sin ningún cambio sustancial "y las circunstancias han cambiado". Añadió que "la carrera profesional de los compañeros es diferente a la que se prestaba hace 22 años".
El representante de la Confederación Intersindical Gallega en el organismo estatal, José Juan Fernández, aseguró que el objetivo de la huelga es "conseguir una Inspección de Trabajo de futuro que dé la suficiente cobertura a las necesidades con los cambios en el mercado de trabajo y normativos que se van produciendo tanto a nivel estatal como a nivel europeo".
Los sindicatos quisieron recordar que actualmente hay 1.967 inspectores de Trabajo, 60 más que en marzo, cuando fue convocada la anterior huelga, y 1.228 funcionarios de los cuerpos generales de apoyo, administrativos y de estructura.
Subrayaron que "no se puede cumplir el plan estratégico por fascículos, no se puede cumplir con dos capítulos, hay que cumplirlo entero". También recordaron que la vicepresidenta segunda de Gobierno, Yolanda Díaz, el pasado 12 de mayo reconocía en el Senado que la Inspección de Trabajo está trabajando por encima de sus posibilidades, por lo que "es hora de reforzar la parte operativa para que podamos acabar con la precariedad laboral".
Por último, destacaron que lo que quieren es que se cumpla "lo que la administración acordó con nosotros el pasado 7 de julio de 2021".