Pedro Sánchez sabía, por boca de su círculo de confianza en el PSOE, que mantener a Màxim Huerta en su cargo era "insostenible". José Luis Ábalos, Adriana Lastra y Óscar Puente habían coincidido en tal diagnóstico ante la consulta de Sánchez en torno a Huerta.
Al presidente del Gobierno le pesaba la deslealtad por no haberle avisado ni de su inspección fiscal ni de la publicación de la noticia: Sánchez se había enterado de ello horas antes por El Confidencial. La consecuencia final de esa exclusiva se hizo esperar apenas 10 horas, margen suficiente para que crecieran las presiones contra la continuidad de Màxim Huerta como ministro.
La secuencia de los hechos fue la siguiente:
22:30 de la noche del pasado lunes. Desde El Confidencial llaman a Moncloa para preguntar por los problemas de Màxim Huerta con Hacienda y avisar de la publicación de su exclusiva. Esa llamada supondría el principio del fin del ministro apenas una semana después de su nombramiento.
En la mañana del miércoles, el presidente del Gobierno habla con Huerta por teléfono, a pesar de que él está en Moncloa para una reunión. Sánchez le reprocha no haberle avisado y le exige transparencia y explicaciones públicas, algo a lo que el aún ministro se pone inmediatamente con una ronda de entrevistas en varias radios.
La idea del cese o la dimisión aún no está sobre la mesa pero las presiones sobrevuelan. A medida que pasa el día y se conocen los detalles de las sentencias contra Huerta, aumenta la presión desde el PSOE e incluso algún cargo del partido se ve obligado a dar explicaciones incómodas, como fue el caso de Magdalena Valerio.
Pedro Sánchez no duda en consultar a su círculo de confianza. Según ha posido saber laSexta Noticias, el presidente habla al menos con José Luis Ábalos, Adriana Lastra y Óscar Puente y recibe el mismo diagnóstico de todos ellos: "la situación es insostenible".
También llega presión desde Podemos.Pablo Iglesias, muy duro, da tres opciones al Gobierno: dimisión, cese o, en su defecto, reprobación del Congreso.
Y a todo ello se sumó esta puntilla: un vídeo de 2015 que invade las redes sociales en el que Pedro Sánchezse comprometía a eliminar de su Gobierno a cualquier miembro que creara una sociedad o empresa con intención de pagar menos impuestos. La consecuencia final la conocemos todos: Màxim Huerta dimitía de su cargo como ministro de Cultura y Deporte y lo anunciaba en comparecencia pública a las 19:00 horas del miércoles 13 de junio de 2018. Una semana duró en el cargo.
