Alberto Núñez Feijóo ha llegado al Congreso de los Diputados, a su intento de investidura, sin los apoyos que necesita pero arropado por prácticamente todo el partido. No faltaba nadie siguiéndole a su entrada a las Cortes y en el hemiciclo han estado presentes los presidentes autonómicos del PP.

Tras los aplausos iniciales, al poco de entonar su discurso, Feijóo hacía anuncios. Entre ellos, promete subir el SMI, lo que ha hecho estallar de la risa al Gobierno en funciones. Y además de algunas propuestas por si logra por sorpresa convertirse en presidente, el líder del Partido Popular ha querido mostrar el tipo de oposición que hará si Sánchez logra quedarse en La Moncloa.

Pero en su discurso han sobresalido varias contradicciones aparentes entre el Feijóo de este lunes y el de los últimos meses, al frente del PP.

La primera, es que propone usar el impuesto a la banca para rebajar las cuotas de los hipotecados, el mismo impuesto contra que el que el PP votó 'no' en noviembre de 2022. Lo único que suaviza esta contradicción es que ya en campaña electoral Feijóo aclaró que mantendrían este impuesto.

Otras de sus contradicciones tiene que ver con la ayuda 'anticrisis' de 200 euros, la subida del salario mínimo interprofesional (SMI) y la gratuidad de los transportes públicos. Ninguna de esas medidas recibió el apoyo del PP con Feijóo ya mandando en la calle Génova, y sin embargo hoy ha propuesto algunas modificaciones, no ha dicho que vaya a eliminarlas. Por ejemplo, propone subir el SMI al 60% del sueldo medio.

También en su discurso, Feijóo se ha mostrado firme contra la violencia machista, olvidando queel PP ha pactado en más de 100 ayuntamientos y seis Gobiernos autonómicos con una ultraderecha que niega ese término. Por ejemplo, en Les Corts Valencianes ahora la pancarta que usan PP y Vox para los minutos de silencio por las mujeres asesinadas se lee "No a la violencia contra las mujeres", eliminando el término violencia machista.

La última contradicción que encontramos en Feijóo tiene que ver con que siempre clama porque gobierne la lista más votada, pero algunos de sus líderes autonómicos están en el poder sin haber sido los más votados en las pasadas elecciones autonómicas.

También Isabel Díaz Ayuso, en su primer mandato, gobernó sin haber ganado las elecciones; lo mismo le ocurrió a Juanma Moreno en Andalucía en 2018, a Fernando López Miras en Murcia y a Fernando Mañueco en Castilla y León.

Indignación en el PP por la sorpresa de Óscar Puente

La sorpresa de la tarde en el Congreso de los Diputados de este lunes, no obstante, se llama Óscar Puente, exalcalde de Valladolid y ahora diputado. Él ha sido el elegido para subir a la tribuna para rebajar la investidura de Feijóo, para desmontar el relato de la lista más votada.

Este cambio de planes ha sido recibido en el PP al grito de "cobarde". Dicen fuentes de Génova a laSexta que Sánchez "ha preferido ahorrarse otra humillación" pero que su actitud demuestra que "no es digno ni de la Presidencia, ni del acta, ni del cargo de secretario general del PSOE".

Las caras de estupefacción entre los 'populares' han sido visibles y notables. La indignación del PP venía motivada sobre todo porque Feijóo ha llegado dispuesto a batirse con Pedro Sánchez, o al menos con Patxi López... pero no ha sido así y al candidato de investidura le ha molestado tanto, que se lo ha hecho saber al presidente del Gobierno en funciones.

¿Y por qué el PSOE ha elegido para subir a la tribuna al exalcalde de Valladolid? Pues porque tiene algo en común con Feijóo: Puente también ganó las elecciones en su municipio y sin embargo actualmente no está en el Ayuntamiento porque allí el Partido Popular y Vox llegaron a un acuerdo para formar gobierno.

Así, las cosas, Puente ha ocupado gran parte de su discurso "a recordar lo que dice el Artículo 99 de la Constitución: será presidente quien obtenga la mayoría absoluta de los votos de esta cámara en primera votación o mayoría simple en la segunda".

El segundo round entre el socialista y Feijóo ha sido sobre los llamamientos del PP para que algunos diputados socialistas traicionen a su partido y voten a Feijóo o se abstengan en la segunda votación de investidura.

"Pierdan toda esperanza de quebrar a este PSOE, que ya se blindó hace años contra cualquier injerencia externa en sus procesos de toma de decisiones" ha argumentado Puente. El líder del PP ha insistido en que seguirá tendiendo la mano hasta que llegue alguien en el PSOE "con la determinación y el sentido de estado suficientes para cogerla".

Los independentistas, en el foco

Otro de los focos de la jornada ha apuntado a los grupos catalanes independentistas.. Junts per Catalunya y Esquerra Republicana han acelerado en esa competición por vender quién lleva más lejos las negociaciones con Pedro Sánchez.

Desde Catalunya, el President Aragonés, de ERC, asegura quela amnistía no es suficiente y utiliza la palabra referéndum. Desde Junts, la presidenta del Parlament afirma que no le "temblarán las piernas" para desobedecer. Hace sólo unos días, la vicepresidenta Yolanda Díaz pidió que renunciaran a la vía unilateral.

Tanto Gabriel Rufián (ERC) como Míriam Nogueras (Junts) han intervenido íntegramente en catalán. El primero, con un discurso en la línea de Aragonès, diciendo que una amnistía pondrá las bases para que haya otro "1 de Octubre". La segunda ha confirmado que "la negociación no está, pero se le espera". "Las condiciones de Junts no han cambiado. Son públicas, veremos si alguien quiere aceptarlas y cumplirlas", ha apostillado.

En representación de Sumar, Marta Lois es quien ha salido a dar la réplica a Feijóo. Ha acusado a Feijóo de hacerles perder el tiempo y de no entender la pluralidad de España.

El líder del PP ha respondido que la imagen de la degradación del país es la que da Sumar. Tono muy distinto ha tenido el cruce entre Feijóo y Santiago Abascal. El candidato y el líder de la ultraderecha han mostrado una sintoníaque no habíamos visto hasta ahora.