Irene Montero ha criticado en el Consejo de Ministros la propuesta de Vox de implantar un 'pin parental' para que los padres tengan que autorizar de manera previa y expresa la asistencia de sus hijos a cualquier tipo de actividad sobre diversidad afectivo-sexual celebrada en un centro escolar, recibiendo información anticipada de todas ellas.
"Una medida como esta supone una clara ruptura del pacto de Estado contra la violencia de género. Entendemos, también, que el 'pin parental' es un elemento claro de censura educativa y, sobre todo, de machismo", ha destacado la ministra de Igualdad.
De esta manera, Montero ha defendido que "los hijos e hijas de padres o madres machistas tienen el mismo derecho que cualquier otro niño o niña a ser educados en libertad en el feminismo y la igualdad, y en los valores que ya hace mucho tiempo que la humanidad consideró que eran los valores que nos permiten a todos y a todas tener una vida digna de ser vivida".
"Los niños de padres homófobos o machistas tienen derecho a recibir educación afectivo sexual, saber que pueden amar a quienes quieran y cuando quieran. La educación en valores igualitarios es uno de los pilares de la democracia y de este Gobierno", ha concluido.
El formulario que Vox quiere que firmen los padres
Vox ya ha colgado en su web un modelo de formulario dirigido al director del centro educativo. En el documento en cuestión piden que se informe a los padres de cualquier taller o charla de tipo afectivo-sexual para, en base a ello, dar su consentimiento para la asistencia de sus hijos.
El formulario indica además las instrucciones para presentar esta solicitud e incluso avisa de los pasos a seguir si el centro escolar se negara a contar con este permiso de asistencia. Vox insiste en que este documento en pro del 'pin parental' trata de frenar el "evidente adoctrinamiento en ideología de género que hay en las aulas".