Tras casi dos semanas en huelga de hambre, la salud de Jordi Turull comienza a resentirse. "No hay señales de alarma. A pesar de mantenerse estables, el tiempo transcurrido y la situación individual hacen aconsejable que Jordi Turull sea trasladado a la enfermería", explica su médico en un tweet.
Su médico ha revelado en esta red social que ha sido trasladado a la enfermería de la prisión de Lledoners. A pesar de que no hay señales de alarma, las fuerzas independentistas dejan patente su preocupación. "Nuestro apoyo, no sólo a él, sino también a su familia, que en estos momentos debe estar sufriendo ante una situación extrema. Pero también es extrema la vulneración de sus derechos", señala el presidente del Parlament.
El president Torra no ha querido referirse a este asunto, pero sí ha mandado fuerzas vía redes sociales. "Estimado Jordi Turull te mando toda la fuerza y un inmenso abrazo. Familia Turull os acompañamos con todo nuestro calor. Estamos a vuestro lado", reza el tweet de Quim Torra.
Esta es la última imagen del exconseller en prisión. Desde su partido deslizan que está débil y él mismo lo reconocía hace un par de días en Twitter. Si el deterioro se agrava, el Tribunal Supremo no descarta traer a los políticos presos de vuelta a cárceles madrileñas.
Puigdemont ha vuelto a cargar contra la Justicia española, tildando la situación de "vergonzosa". De momento, se descarta alimentar de forma forzosa a Turull, pero si su salud empeora será trasladado al hospital penitenciario de Tarrassa.