Rull fue trasladado bajo custodia policial al Hospital Sant Joan de Déu de Manresa (Barcelona) para visitar a su hijo, que la víspera de Reyes, y durante un vis a vis familiar, se cayó y sufrió una fuerte conmoción en la cabeza, lo que le produjo una pérdida de conocimiento.
Los servicios médicos tuvieron que evacuarlo de urgencia y en ambulancia hasta el Hospital Sant Joan de Déu de Manresa, donde pasó unas horas desorientado, sin reconocer a sus familiares, aunque, finalmente, los facultativos le dieron el alta y pudo pasar la noche de Reyes en casa.
Según fuentes del Supremo, Rull no tenía autorización judicial ni del Supremo ni del juzgado de guardia de Manresa y la comunicación al tribunal del que dependen fue a posteriori. El Supremo va a estudiar el caso por si cabe alguna acción contra la directora de Lledoners, responsable del permiso.
Consultado por los servicios penitenciarios, el juzgado de guardia de Manresa ha recordado que el reglamento penitenciario prevé la concesión de permisos extraordinarios de urgencia por parte de la administración competente. El artículo 161.4 de dicho reglamento penitenciario faculta al director general para autorizar un permiso extraordinario para casos de urgencia.