PP y Ciudadanos han avanzado en el acuerdo programático para un futuro gobierno andaluz de coalición, pero mantienen diferencias sobre asuntos de regeneración democrática y en el papel del PSOE, ya que la formación naranja opta por pedir la abstención a los socialistas y los populares miran a Vox.
La reunión de dos horas que los equipos negociadores han celebrado en el Parlamento andaluz, que se une a varios días de trabajo durante la semana pasada, no ha servido para cerrar un acuerdo programático porque, aunque se ha producido un avance importante, se han constatado "diferencias" en algunos puntos.
Cs entiende que la fórmula es cerrar primero un pacto con el PP y después dialogar con el PSOE para pedirles su abstención, formando un "bloque constitucionalista", mientras que los populares creen que los socialistas no pueden formar parte del cambio de ninguna manera y prefieren dirigirse a Vox, con los que hay "conversaciones".
Algunas medidas de regeneración también son por el momento un obstáculo, principalmente la eliminación de los aforamientos, ya que Cs quieren incluir su supresión en Andalucía y el PP lo deriva a una reforma de la Constitución para que desaparezcan en toda España. Sin embargo, los dos líderes, Juanma Moreno (PP) y Juan Marín (Cs) son optimistas y aspiran a llegar a un acuerdo programático durante esta semana, para seguir con la Mesa y el Gobierno.
Moreno ha estado acompañado del secretario general del PP, Teodoro García Egea, de su número dos en el PP-A, Dolores López, y del vicesecretario Javier Maroto; mientras que a Marín se han unido el secretario general de Cs, José Manuel Villegas, la diputada Marta Bosquet y la número dos por Sevilla, Ana Llopis.
El popular Juanma Moreno entiende que las negociaciones van a un ritmo muy lento y pone como límite para un acuerdo total (programa, Mesa del Parlamento y Gobierno) el 26 de diciembre, un día antes de la constitución de la Cámara, mientras que Marín considera que es "un acuerdo complicado" y que "no hay que ir con prisas".
Ciudadanos ha planteado al PP establecer un calendario de medidas para priorizar actuaciones en los primeros cien días de gobierno, algo que a los populares les parece "razonable y sensato", por lo que trabajarán sobre ello en las próximas jornadas. En comparecencia de prensa, Moreno ha subrayado que Cs reitera sus "constantes invitaciones" al PSOE para que se abstenga o le apoye y ha defendido que el PP no lo ve necesario.
Además, ha admitido "conversaciones" con Vox, aunque no una "negociación activa". "Como partido autónomo que somos podemos hablar y escuchar a todo el mundo, estamos escuchando a cualquier fuerza que llame a nuestra tierra", ha indicado Moreno, quien ha criticado que Cs quiera "hacer partícipe de manera directa o indirecta al PSOE, tanto en la Mesa como en la investidura. Eso no puede ser así".
Moreno ha mostrado su preocupación por la "ralentización" de todo el proceso y ha advertido de que no puede haber un acuerdo en la Mesa del Parlamento si no hay un pacto de gobierno, lo que supondría "un fracaso descomunal" por el que Cs tendría que dar explicaciones.