Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), el detenido ingresó en prisión el pasado 21 de septiembre por orden del juzgado de instrucción número 4 de Terrassa, que investigaba el caso y que ratificó su decisión el 4 de octubre.

El hombre fue detenido por los Mossos d'Esquadra por orden del juez instructor, en el marco de una causa en la que se le investigaba por haber difundido en un chat de WhatsApp su intención de matar al presidente del Gobierno, en venganza por el anuncio de la exhumación de los restos de Franco.

El juez acordó el ingreso en prisión preventiva del detenido, tras comprobar que disponía en su casa de un arsenal de armas, lo que daba verosimilitud a sus amenazas de que pretendía atentar contra el presidente del Gobierno. La causa en la que está imputado el detenido está abierta por los delitos de conspiración para atentar contra la autoridad con uso de arma, amenazas graves, tenencia ilícita de armas, municiones y explosivos, así como incitación al odio.

Según informa el digital Público, la detención se produjo en septiembre y el vigilante, Manuel M.S., de 63 años y con un historial de problemas psicológicos, ingresó en prisión acusado de una "proposición de homicidio de autoridad", con "tenencia ilícita" de un "depósito de armas", por orden del Juzgado de Instrucción número 3 de Terrassa.

Imagen de Pedro Sánchez en el desfile de la Fiesta Nacional

El detenido es un experto tirador del mejor del club de tiro olímpico del Vallés, en el que practicaba y competía desde hacía muchos años, y era capaz de modificar y construir armas cortas o largas, según Público.

Manuel M. se indignó cuando el Gobierno comunicó su intención de exhumar del Valle de los Caídos los restos de Francisco Franco, al que admiraba, y empezó a buscar cómplices para acabar con ese "rojo de mierda", en referencia a Sánchez, en un grupo reducido de WhatsApp.

Fue una usuaria del chat la que dio la voz de alarma sobre las intenciones de Manuel M. cuando pasó de los insultos y amenazas contra el líder del PSOE a solicitar apoyo logístico para cometer un atentado contra Pedro Sánchez, aprovechando su pericia como francotirador y su arsenal.

Los Mossos solicitaron una orden de entrada y registro del domicilio de Manuel M., donde el pasado 19 de septiembre hallaron 16 armas de fuego cortas y largas, incluido un fusil de asalto militar Cetme, un subfusil ametrallador checoslovaco Skorpion vz. 61 y cuatro rifles de alta precisión, capaces de acertar un blanco hasta a 1.500 metros de distancia.

Además, en su coche llevaba dos pistolas, una de ellas modificada e ilegal. El detenido frecuentaba ambientes ultraderechistas, pero nunca había participado en actos violentos, por lo que no tenía antecedentes policiales y no estaba controlado por las fuerzas de seguridad.