Decisión del TSJC

La Justicia rechaza la querella de Puigdemont contra el juez Aguirre por la instrucción de la trama rusa del procés

El contexto El expresident catalán acusaba al magistrado, ya jubilado, de prevaricación y malversación por su instrucción del caso Volhov, que investiga las supuestas conexiones entre el procés y Rusia.

El líder de Junts, Carles PuigdemontEl líder de Junts, Carles PuigdemontEFE/EPA/OLIVIER HOSLET

El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha rechazado investigar la querelladel expresident catalán Carles Puigdemont contra el juez Joaquín Aguirre, a quien acusaba de prevaricación y malversación por su instrucción del caso Volhov, que investiga las supuestas conexiones del procés en Rusia.

En un auto citado por Efe y Europa Press, la Sala Civil y Penal del TSJC, de acuerdo con el criterio de la Fiscalía, considera que no hay indicios para admitir a trámite la querella que Puigdemont, Josep Lluís Alay y el abogado de ambos, Gonzalo Boye, interpusieron contra el juez, jubilado desde el pasado 15 de enero. El tribunal alega que, analizada la trazabilidad procesal de las actuaciones, procede a inadmitirla a trámite por no haber quedado acreditada "ni siquiera de modo indiciario, la existencia de actuación delictiva alguna".

Puigdemont, Alay y Boye presentaron una querella contra Aguirre después de que este ordenase abrir una nueva línea de investigación dedicada a investigar una supuesta injerencia rusa durante el procés. En concreto, el magistrado pedía investigar en esta pieza separada "una serie de presuntas irregularidades en la concesión de subvenciones" entre 2012 y 2017 por parte de diferentes entidades públicas catalanas, cuyos beneficiarios serían dos personas jurídicas: CATmon e Igman.

En aquel momento, los querellantes entendieron que se les había atribuido de forma "injusta y sorpresivamente" la condición de investigados por estos hechos y que el juez había desobedecido a la Audiencia de Barcelona, que había estimado el recurso de apelación de la defensa de uno de los investigados. Los querellantes consideraban que la acción de Aguirre tenía como verdadero objeto frustrar de manera "perversa" la aplicación de la amnistía y tildaron el procedimiento de "mastodóntico", "prospectivo" y "fantasioso".

El tribunal, si bien admite que Aguirre usó expresiones que "podrían ser reprobadas por desafortunadas y extravagantes" en su auto, recuerda que fue revocado tras el recurso de apelación de las defensas de los investigados por la Audiencia de Barcelona. Considera que los hechos relatados en la querella "no son constitutivos, como alega el Ministerio Fiscal, de un delito de prevaricación judicial -ni dolosa ni culposa-, así como tampoco lo son de un delito de malversación de caudales públicos".